De lección magistral de comunicación fue calificada por la prensa internacional la ponencia que estuvo a cargo de nuestra corresponsal en Roma y en el Vaticano, Valentina Alazraki, invitada por el papa Francisco a ser relatora en el tercer día de la cumbre mundial sobre abusos a menores por parte de clérigos, dedicado al tema de la transparencia. A la corresponsal se le pidió explicar a los presidentes de las conferencias episcopales de todo el mundo, así como a los superiores de órdenes religiosas y a la propia Curia, cómo, en su opinión, la Iglesia debería comunicar acerca de este espinoso tema que ha puesto en tela de juicio su misma credibilidad.
Por eso, ante conductas delictivas como los abusos a menores, una institución como la iglesia, ¿creen que tiene otro camino para ser fiel a sí misma, que no sea el de ponerse del lado de la víctima y no del victimario? ¿Quién es el hijo más débil, más vulnerables? ¿El sacerdote abusador, el obispo abusador o encubridor a la víctima?”, cuestionó Valentina Alazraki, corresponsal de Televisa en El Vaticano.
A la corresponsal de Noticieros Televisa no le tembló la voz cuando le preguntó a los prelados.
Háganse una pregunta: ¿Son ustedes enemigos de los abusadores y de los encubridores, tanto como lo somos nosotros? Nosotros hemos elegido de qué lado estar. ¿Ustedes, lo han hecho de verdad, o de palabra?”, sentenció Valentina Alazraki, corresponsal de Televisa en El Vaticano.
Valentina Alazraki, quien dijo hablar no sólo como periodista sino también como madre y representante de la sociedad civil, afirmó que la prensa no es la enemiga de la Iglesia y que incluso puede ser su aliada si la iglesia decide estar del lado justo, pero también les advirtió:
Pero si ustedes no se deciden de manera radical a estar del lado de los niños, de las mamás, de las familias, de la sociedad civil, tienen razón a tenernos miedo, porque los periodistas que queremos el bien común nos volveremos sus peores enemigos”.
Añadió que deben entender que tienen que informar con transparencia porque de no hacerlo, permiten que se cometan otros crímenes.
Comunicar es un deber fundamental porque de no hacerlo ustedes se vuelven automáticamente cómplices de los abusadores”, señaló Valentina Alazraki.
La corresponsal afirmó que al centro de la atención de la Iglesia y de su comunicación deben de estar siempre las víctimas, porque si no se conocen a las víctimas no se puede ni informar ni enfrentar el problema.
No se puede hablar de este tema si no se han escuchado a las víctimas, si no se ha compartido su dolor con ellas, si no se han tocado con la mano las heridas que los abusos han provocado, no sólo en el cuerpo sino también en su mente, en su corazón y en su fe”, dijo Valentina Alazraki, corresponsal de Televisa en El Vaticano.
Al referirse a los 45 años como corresponsal en el Vaticano, la periodista afirmó que le consta que hubo encubrimiento sistemático de casos de abusos debido no sólo a la defensa del buen nombre de la institución sino también debido a la corrupción económica y política y el de Marcial Maciel fue el caso más grave.
Para mí este es el caso más emblemático de una comunicación enferma, corrupta, del que se puede y debe aprender, pienso, muchas lecciones”, agregó Valentina Alazraki.
Tras afirmar que la transparencia es fundamental, la corresponsal de Noticieros Televisa explicó que el costo del silencio y del no comment es mucho más caro que el de una información transparente, por dura que sea.
Creo que deberían tomar conciencia que cuanto más encubran cuanto más sean avestruces, cuanto menos informen a los medios y por lo tanto a los fieles y por lo tanto la opinión pública, más grande será el escándalo. Yo creo que la iglesia debería tener a todos los niveles experto en comunicación y escucharles cuando les digan que siempre es más barato informar que callar o mentir. Es una quimera pensar que hoy se pueda esconder un escándalo. Es como tapar el cielo con un dedo. No se puede, ya no es ni aceptable ni admisible”.
La ponencia de Valentina Alazraki fue seguida por la prensa mundial en la sala de prensa de la Santa Sede, que la aplaudió varias veces durante la misma y también recibió con un largo aplauso a su colega.
En el último día de la reunión nuestra corresponsal fue invitada a participar en la conferencia de prensa final como relatora. Así la recibió Alessandro Gisotti portavoz interino de la Santa Sede:
Verdaderamente importante, sabemos que al papa le gustó, me ha dicho personalmente, ‘ha sido fuerte, ha sido fuerte Valentina’, y pienso que es importante por el hecho de que ha sido la última intervención del encuentro, pienso que esto ha sido una cosa importante, subrayando cuan decisiva es la comunicación”.
FINALIZÓ LA CUMBRE Y EL PAPA PIDIÓ PERDÓN
Al finalizar la primera cumbre mundial sobre abusos a menores por parte de clérigos el papa Francisco afirmó que la Iglesia está plenamente consciente de que al centro de su misión está el proteger a los niños de los lobos feroces. Reconoció y pidió perdón por todos los errores hechos en el pasado, por los dramáticos sufrimientos de las víctimas y por el encubrimiento de los culpables.
No hay explicaciones suficientes para estos abusos hacia los niños. Por eso ha crecido actualmente en la Iglesia la conciencia de que se debe no sólo intentar limitar los gravísimos abusos con medidas disciplinares y procesos civiles y canónicos, sino también afrontar con decisión el fenómeno tanto dentro como fuera de la Iglesia”, dijo el papa Francisco.
Si bien, se dijo consciente que el fenómeno de los abusos está presente en cualquier ámbito de la sociedad, afirmó que: “La inhumanidad del fenómeno a escala mundial es todavía más grave y más escandalosa en la Iglesia porque contrasta con su autoridad moral y su credibilidad ética”.
De aquí que al final de esta reunión en la que participaron los presidentes de las conferencias episcopales de todo el mundo, el papa compartiera con los fieles el deseo de que la Iglesia recupere su liderazgo moral.
Queremos que todas las actividades y los lugares de la iglesia sean siempre plenamente seguros para los menores, que se tomen todas las medidas posibles para que estos crímenes no se repitan, que la iglesia vuelva a ser absolutamente creíble y confiable”, señaló el papa Francisco.
Al final de la reunión los organizadores de la cumbre explicaron que saldrá a la brevedad un vademécum con preguntas y respuestas para que las conferencias episcopales sepan enfrentar los diferentes casos de abuso o encubrimiento, se revisará el secreto pontificio que de acuerdo con varios participantes en la reunión no debería aplicar en el caso de abusos a menores y saldrá un documento del papa, con una nueva legislación sobre abusos para la Curia y el Estado de la Ciudad del Vaticano.
Monseñor Charles Scicluna, uno de los máximos expertos, quien realizó las investigaciones en el caso de Marcial Maciel y el año pasado en los casos de abusos en Chile sintetizó los que fueron en su opinión los logros de la cumbre.
Creo que hay ahora un punto muy claro en la política de la iglesia que el abuso de menor es un crimen mayor pero también lo es el encubrimiento. Y ya no hay vuelta atrás”, sentenció monseñor Charles Scicluna, miembro del comité organizador de la cumbre.
También subrayó la importancia del encuentro con las víctimas que estuvieron presentes en la reunión o que enviaron un testimonio. Fue vital para que se diera, dijo, un cambio en la sensibilidad de los presentes.
Ellas piden más espacio, No podemos dejar de escuchar a las víctimas, necesitamos escuchar la voz de las víctimas y de los sobrevivientes”, añadió monseñor Charles Scicluna, miembro del comité organizador de la cumbre.
Las víctimas y activistas que llegaron hace cuatro días a Roma para seguir de cerca la cumbre manifestaron su decepción por la falta de resultados concretos.
Queremos un plan global de acción, que haya medidas específicas y concretas, en el que haya un calendario y sobre todo que nos diga exactamente como esas medidas se van a implementar, como se va a monitorizar que realmente se cumplan o no, porque la iglesia católica ha prometido tantas cosas tantas veces, que ya no nos creemos nada”, denunció Miguel Hurtado, víctima de un monje benedictino en la abadía de Montserrat.
Los organizadores de la cumbre anunciaron que continuarán las reuniones para darle seguimiento a la reunión que es tan solo un paso más en el camino emprendido por la Iglesia.
Fuente: Noticieros Televisa