El presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, intervino y siguió en detalle un operativo internacional desarrollado en las últimas horas para garantizar la integridad física y la seguridad de Evo Morales.
Este plan, revelado por el medio argentino Clarín, contempla la salida del presidente de Bolivia en un avión con destino a México, cuyo gobierno le concedió el asilo político.
El operativo se creó en medio de la crisis política y social generada a partir de las elecciones del pasado 20 de octubre, misma que derivó en la renuncia de Morales Ayma tras el ultimátum emitido por el jefe de las Fuerzas Armadas de Bolivia.
De acuerdo con Clarín, Fernández habló con el presidente Andrés Manuel López Obrador en un diálogo que resultó clave en la creación del corredor de resguardo diplomático que permita a Evo Morales abandonar su país y refugiarse en México.
El mandatario sudamericano despegaría de Bolivia y pasaría por el espacio aéreo de Perú con destino a nuestro país; debería hacer escala en Lima.
Por otra parte, el presidente electo argentino, también estableció comunicación con Morales Ayma, quien presuntamente permanece en la región de Chapare; en respuesta, el boliviano le transmitió su respaldo, reiteró su repudio al golpe de estado.
El Ministerio de Relaciones Exteriores argentino también habría sido consultada sobre esta operación, e incluso su titular, Jorge Faurie, habría contactado a su similar de México, Marcelo Ebrard, para ofrecer asistencia logística a un avión mexicano en caso de que se decida crear un plan de salida para Evo Morales.
Desde el estallido de la crisis boliviana, México recibió en su embajada en La Paz a 20 ex funcionarios del gobierno de Morales Ayma.
Fernández habló con el presidente de Perú, Martín Vizcarra, para agradecerle su colaboración para permitir el sobrevuelo de la aeronave de gobierno mexicano en el espacio aéreo peruano.
De acuerdo con Clarín, también hubo contacto con el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, país que se tomó en consideración como una alternativa en caso de que no prosperara el plan principal: que Evo Morales llegara a México.
“Si usted lo pide, Paraguay está abierto a recibirlo (a Morales)”, fue la respuesta del mandatario paraguayo, de acuerdo con fuentes cercanas a Fernández.
Perú autoriza ingreso de avión que llevará a Evo Morales a México
Este lunes, el gobierno de Perú confirmó que autorizó el sobrevuelo y abastecimiento de combustible a una aeronave de bandera mexicana que vuela rumbo a Bolivia para recoger al renunciante presidente de ese país.
La Cancillería peruana señaló que la medida se tomó “a solicitud del Gobierno de México” y que “es consistente” con las obligaciones “derivadas de la Convención de Caracas de 1954 sobre Asilo Diplomático”.
Tras indicar que la aeronave partió de Lima a las 18:30 h local hacia territorio boliviano, la Cancillería reiteró el “compromiso” de Perú “con una transición pacífica y dentro del orden constitucional en la república de Bolivia“.
Medios locales informaron que la aeronave del gobierno mexicano aterrizó y se abasteció de combustible en el Grupo Aéreo Número 8, el aeropuerto militar adjunto al aeropuerto internacional de Lima.
La información sobre la autorización del ingreso a la aeronave al espacio aéreo de Perú había sido adelantada por Alberto Fernández.
“Mi gratitud al presidente de Perú, Martín Vizcarra, porque ha abierto el espacio aéreo peruano para que pueda llegar el avión de México para buscarlo a Evo”, señaló Fernández en Buenos Aires.
Fernández, que asumirá la Presidencia argentina el próximo 10 de diciembre, destacó que Vizcarra “se movió diplomáticamente para tratar de facilitar la llegada de ese avión, que todavía estamos esperando que llegue y espero que pronto”.
El primer ministro de Perú, Vicente Zeballos, había señalado horas antes que Perú no estaba en la posibilidad de negar “el paso inocente” a ninguna aeronave, de acuerdo al derecho internacional, al ser interrogado sobre la posibilidad de que Morales intentara ingresar al espacio aéreo peruano.
Morales renunció el domingo a la presidencia de Bolivia, después de 14 años en el cargo, a raíz de una crisis política y social que se agravó tras las cuestionadas elecciones del 20 de octubre.
Con información de Clarín y EFE