Ante los próximos festejos de Año Nuevo, Miriam Lira editora del suplemento GastroLab dio a conocer en Informativo el Heraldo Fin de Semana de donde surgió la tradición de comer 12 uvas durante esta celebración, además de otros rituales para atraer la abundancia y el amor.
En la sección de GastroLab, dijo que esta práctica la trajeron los españoles, debido a que se realizaba en Europa.
La primera teoría de cómo surgió esta tradición se remonta a la década de 1890. Un alcalde de Madrid prohibió que en su ciudad las personas salieran a beber en Día de Reyes, como era tradición; sin embargo, en respuesta el poblado salió el día de Nochevieja a celebrar comiendo uvas y tomando vino espumante, imitando a la clase burguesa.
La segunda teoría sitúa los orígenes en 1900. En ese año los productores de Alicante, en el sureste de España, tuvieron una cosecha excedente de uvas blancas de la variedad típica del lugar, llamadas Aledo.
Finalmente, urgió al público a comprar esta fruta pues hasta hoy el precio está en más de 60 pesos y suele subir cuando se acerca el Año Nuevo.
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