Integrantes del Movimiento Nacional Taxista, que integra a más de 20 mil transportistas en la Ciudad de México y a 200 mil a nivel nacional, anunciaron un paro nacional y el cierre de las principales avenidas de la capital del país el próximo 3 de junio, al considerar que las autoridades han impulsado la competencia deslealdel servicio con quienes lo dan con aplicaciones.
En conferencia de prensa, los taxistas argumentaron que los que trabajan con aplicaciones no tienen que pagar; por ejemplo, una concesión de 40 mil pesos, y sólo se les cobra 713 pesos; por la revista el precio es de mil 635 pesos, pero los conductores de plataformas no tienen que liquidar ese concepto.
Además, los taxis deben pagar una licencia y tomar un curso que cuesta dos mil 565 pesos y sus contrapartes no; por la cromática el precio es de dos mil 500 pesos, mientras que las plataformas no tienen que pintar de manera específica sus autos; además los taxistas tradicionales tienen una tarifa fija mientras que los de las aplicaciones pueden hacer cobros dinámicos o libres a los usuarios.
Explicaron que, al no tener un registro ante las autoridades, los transportistas de las plataformas no garantizan la seguridad de sus usuarios y como muestra, aseguraron que el año pasado se reportaron casi 400 delitos en las unidades, entre ellos, violaciones, lo que va contra su publicidad que calificaron como “engañosa”.
A decir del dirigente de los taxistas, Ignacio Rodríguez Mejía, éstos son tratados en la capital con discriminación e inequidad y calificaron a las autoridades como aliados de las aplicaciones. Además, se quejaron de la falta de atención del secretario de Movilidad capitalino, Andrés Lajous Loaeza.
Aunque reconocen que el cierre de calles afectará a los usuarios y a toda la ciudadanía, agregaron que es la única opción que considera posible ante la falta de atención de las autoridades.
Apenas la semana pasada, el colectivo de empresas de redes de transporte, que engloba a prestadores de servicios de taxi vía aplicaciones móviles, manifestaron su inconformidad con el nuevo reglamento que anunció la Secretaría de Movilidad de Ciudad de México, que los obliga a regularse como los taxis concesionados. Aseguran que la medida tendrá “graves repercusiones” y que “no contempla un periodo razonable para su implementación”.
La jefa de gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, respondió a estos señalamientos:
No se van a perder empleos con las regulaciones que se hicieron y va a estar el secretario de Movilidad abierto al diálogo, pretendemos poner orden y hacer piso parejo, pero no se trata de afectar a nadie, obviamente hay empresas globales que lo que buscan es que no haya ningún tipo de regulación”, sostuvo.
Con información de Notimex y En Punto