Toneladas de excremento humano en montaña de Alaska podrían derretirse

El especialista en glaciares y en glaciaciones, Michael Loso, advirtió que más de 60 toneladas de excrementos humanos, que se encuentran congeladas en la montaña más alta de Estados Unidos, en Alaska, podrían derretirse y reaparecer pronto, debido al calentamiento global.

De acuerdo al diario estadounidense USA Today, que cita a Loso, la apariencia de dichos desechos no será muy diferente a lo habitual.

Los excrementos han sido dejados a lo largo de años por miles de escaladores que ascienden a la montaña.

 

Según directivos del Parque Nacional Denali, donde se encuentra el nevado, más de mil 200 escaladores ascienden a la montaña cada año.

Michael Loso aseguró que tales desechos aparecerán aplastados, muy húmedos y biológicamente activos, por lo que es de temer la presencia de bacterias vivas tales como la Escherichia coli.

Foto: Escaladores en montaña del Parque Nacional Denali, Alaska, 2 de septiembre de 2015. Estados Unidos
Escaladores en montaña del Parque Nacional Denali, Alaska. (AP, archivo)

Se prevé que los primeros de estos desechos, que se encuentran en uno de los campamentos situados más abajo en la montaña, empiecen a aparecer este verano, incluso desde este mismo mes, en tanto que los que se encuentran en la cumbre del nevado empezarán a fundirse en las próximas décadas.

Ante esta situación, considerada ya una emergencia, la empresa encargada de los servicios de guías para los alpinistas ha decidido empaquetar y recoger los excrementos.

Las reglas actuales exigen retirar de la montaña todo desecho de este tipo que se encuentre por debajo de los 4, 000 metros de altura.

“El problema de los excrementos es muy real”, concluyó el glaciólogo Michael Loso.

El 20 de julio de 2017, la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) confirmó la presencia de una mancha conformada por desechos fecales que cubría 80 kilómetros cuadrados en la cercanía de Los Cabos, en Baja California Sur.

El viernes 14 de julio de ese año se presentaron reportes de la presencia de una extraña mancha de color rojizo en el mar lo que condujo a la realización de varios análisis.

En un principio, las autoridades argumentaron que en realidad la mencionada mancha se trataba de un derrame ocasionado por la filtración de alguna embarcación, sin embargo, cuando los medios locales comenzaron a hacer sus averiguaciones y presentaron resultados de muestras alternas no hubo más opción que confirmar las suposiciones de que la acumulación se trataba en realidad de excrementos humanos.

Con información de Noticieros Televisa