Un hombre intentó humillar a su ex esposa y arrojó 80.000 centavos en el jardín como pago de manutención: su hija ideó qué hacer con el dinero

Avery Sanford estaba a días de graduarse de la escuela secundaria en Virginia cuando su padre vació un remolque que contenía 80.000 centavos en el jardín delantero de su casa el mes pasado.

“Mi mamá salió y le dijo: ‘¿Qué estás tirando en mi jardín?’. Ella no supo quién era hasta que mi padre gritó: ‘Es el pago final de la manutención de mis hijas’”, reveló en una entrevista con la televisora WTVR.

Devastada por la exhibición de su padre, Sanford, de 18 años, su madre y varios amigos recogieron decenas de miles de centavos y se preguntaron qué deberían hacer a continuación. “Doné los $800 en monedas a un centro de abuso doméstico”, respondió la joven.

Funcionarios de Safe Harbor Shelter, una organización de Richmond que ofrece servicios para sobrevivientes de violencia doméstica, violencia sexual y trata de personas, confirmaron la donación a The Washington Postel jueves.

Las cámaras de seguridad de la casa registraron el hecho cuando el hombre llegó con un remolque para dejar los centavos Foto: (Captura de pantalla WTVR)

“Pudieron convertir una experiencia tan negativa, y lo que su hija presenció, en algo positivo. Encontraron una manera de cambiar esto y no sentirse devastados por ello”, dijo a The Post Cathy Easter, la directora ejecutiva de Safe Harbor.

Desde que los medios locales informaron por primera vez la historia esta semana, el refugio aceptó que ha notado un aumento de más de $ 5,000 en donaciones, y algunas personas citan a la familia como una razón para sus obsequios.

Las imágenes de seguridad del hogar obtenidas por The Post muestran a un hombre en una camioneta que se detiene en una casa con un remolque conectado al vehículo el 21 de mayo. El hombre hizo funcionar el remolque de modo que arrojó los centavos en el césped delantero y la acera de la casa, antes de alejarse, se muestra un video.

“¿Qué estás dejando en mi patio?” Dijo la madre de Sanford, según el video.

El hombre respondió: “Es el último pago de manutención infantil”.

“No es sólo mi madre a quien intenta avergonzar, también lo hizo a mi hermana y a mí”, dijo Avery Sanford, la hija mayor de la pareja Foto: (Captura de pantalla WTVR)

El teniente Matt Pecka de la policía del condado de Henrico le dijo a The Post que un oficial señaló el mes pasado que alrededor de las 2:30 p.m. sucedió “el incidente relacionado con el hogar” en Glen Allen, Virginia, a unas 14 millas al norte de Richmond. Cuando llegó el oficial, encontró una gran cantidad “de centavos en el camino frente a la dirección”, y la madre de Sanford dijo que su exmarido era responsable del desastre.

“La policía de Henrico documentó el incidente; sin embargo, no se presentaron cargos”, dijo Pecka.

Cuando llegó a casa de la escuela, Sanford no podía creer lo que vio.

“No es sólo mi madre a quien intenta avergonzar, también lo hizo a mi hermana y a mí”, dijo Sanford a WTVR. “Es molesto que no lo haya considerado antes de hacerlo”.

Cinco días después, Mary Maupai recibió un correo electrónico en su bandeja de entrada de un extraño. Maupai, directora de desarrollo de Safe Harbor, dijo que la madre, que no tenía afiliación previa con la organización, explicó lo sucedido y señaló que el 21 de mayo era la fecha límite para el pago final de manutención de sus hijas por parte de su ex marido, una cantidad de $ 825.

La hija decidió que dieran ese dinero a un refugio para mujeres y niños víctimas de violencia intrafamiliar Foto: (Captura de pantalla WTVR)

La madre mencionó que Sanford estaba a punto de graduarse de Deep Run High School y asistir a Virginia Tech en lo que debería ser un momento emocionante para ella, dijo Maupai a The Post.

“En cambio, tuvo que presenciar este espectáculo de su padre separado”, escribió la madre el 26 de mayo, según un correo electrónico obtenido por The Post.

Safe Harbor, que se fundó en 1998, se encuentra entre los grupos de servicios para víctimas en todo el país que han visto reducido drásticamente su acceso a fondos federales en los últimos años.

Entonces, cuando la madre de Sanford quiso donar el dinero al centro, Safe Harbor agradeció el regalo. Pero Easter y Maupai no esperaban lo que sucedió a continuación: una avalancha de donaciones impulsada por la acción de la familia. Maupai señaló que los obsequios que citaban la donación de Sanford como catalizador para la donación oscilaban entre $ 25 y $ 1,000.

“El hecho de que estos regalos lleguen en este momento es como un regalo del cielo”, dijo Easter. “Lamento mucho que la familia haya experimentado esto, pero estoy muy agradecido de que se acercaron y eligieron hacer esto y compartir su historia”.

Están orgullosas de convertir un hecho que consideran denigrante a algo positivo al donarlo al refugio donde ese dinero ayudará a otras mujeres Foto: (Captura de pantalla WTVR)

Por extraño que sea descargar tantos centavos por despecho, no es el único caso reciente de alguien que arroja decenas de miles de centavos frente a una casa. Cuando un hombre de Georgia exigió su último cheque de pago después de dejar su trabajo en un taller de reparación de automóviles, su ex jefe respondió dejando más de 91,000 centavos en su camino de entrada en marzo.

Los esfuerzos para llegar al padre de Sanford no tuvieron éxito. En una entrevista con WTVR, el padre dijo que estaba frustrado y que no pretendía empeorar la situación entre él y su hija. Sanford le dijo a la estación de noticias que si bien la decisión de su padre fue “realmente hiriente y perjudicial” para la familia, estaba orgullosa de que el dinero terminara yendo a una buena causa.

“Dar la vuelta y donar ese dinero a las mamás y los niños necesitados, siento que eso realmente convierte esta situación en algo positivo. Puedes aprender de eso”, dijo la joven que está a punto de graduarse.

Maupai espera que la ley de Sanford inspire a otros a donar a los refugios para víctimas. Desde la Pascua, no recuerda otro momento en la historia del refugio en el que un evento difícil se transformó en algo más esperanzador.

“Es realmente una historia tan hermosa. No se puede enfatizar lo suficiente la importancia de ser amables el uno con el otro”, concluyó.

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