
El exfutbolista Roger Lukaku, padre de Romelu y Jordan Lukaku, falleció a los 58 años en Kinshasa. El delantero del Nápoles despidió a su padre con un mensaje
El exfutbolista Roger Lukaku, padre de los internacionales belgas Romelu y Jordan Lukaku, falleció este lunes a los 58 años en Kinshasa, capital de la República Democrática del Congo.
La noticia ha causado conmoción en el fútbol belga e internacional, especialmente por el legado deportivo y familiar que dejó.
Lukaku llegó a Bélgica en 1990 procedente de la actual República Democrática del Congo. Durante su carrera, jugó en clubes modestos de la primera división belga como Boom, Seraing, Germinal Ekeren, Malines y Ostende, donde anotó 47 goles en 135 partidos.
También tuvo un breve paso por Turquía y defendió once veces la camiseta de Zaire, nombre con el que entonces se conocía a su país natal.
Aunque se retiró en 1999 de la élite, continuó algunas temporadas más en categorías inferiores, más adelante en 2010, participó en la fundación del Sporting Club Rojolu, en el Congo, bautizado con las primeras sílabas de su nombre y los de sus hijos Romelu y Jordan.
El adiós de Romelu Lukaku
El delantero del Nápoles y máximo goleador histórico de la selección belga, Romelu Lukaku, dedicó un mensaje de despedida a su padre en Instagram:
«Gracias por enseñarme todo lo que sé. Te estoy eternamente agradecido. La vida nunca volverá a ser la misma. Me protegiste y me guiaste como nadie más. El dolor es inmenso, pero Dios me dará la fuerza para recomponerme. Gracias por todo, papá».
Un legado en el fútbol belga
El fallecimiento de Roger Lukaku deja un vacío en la memoria de los aficionados al fútbol en Bélgica y en el Congo, países donde dejó su huella tanto como jugador como formador. Sus hijos, Romelu y Jordan, continúan su herencia dentro del balompié internacional.
El Horizonte