El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) señaló este lunes el aumento «mínimo» de solo 0.2% en los recursos que el Gobierno mexicano destinará para la niños, niñas y adolescentes en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF).
Para 2021, el presupuesto para menores de edad contempla 716,632 millones de pesos, lo que representa 17 % del gasto programable neto y un incremento anual «mínimo» de 0.2 % en términos reales respecto de 2020, indicó el organismo.
«Las asignaciones presupuestarias entre grupos etarios no son equitativas y se evidencia la necesidad de invertir más en algunos de ellos», advirtió Unicef en el reporte «La infancia y la adolescencia en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2021».
La organización destacó la reducción real de 0.3 % de todo el PPEF, que se estima en alrededor de 6.3 billones de pesos.
Cuando la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) presentó el proyecto en septiembre, lo consideró como «el más austero del siglo XXI» al representar el 25.3% del PIB, con un aumento del 9.2 % en el gasto en salud, ante la crisis de covid-19.
La Unicef reconoció la necesidad de contar con dinero suficiente mitigar los efectos adversos de pandemia, que acumula más de 95,000 muertos y casi 970,000 casos, pero pidió centrar los derechos de niños, niñas y adolescentes en sus prioridades.
«Esto implica la necesidad de priorizar la atención de los sectores más vulnerables de la población para evitar agrandar las brechas en pobreza y bienestar, además de fomentar el consumo y la actividad económica», manifestó el organismo.
Unicef también apuntó a incongruencias en el gasto equitativo del presupuesto al indicar que la población de primera infancia, de 0 a 5 años, representa un 10.3 % del total de la población y el 33 % del total de los menores de edad, pero solo tendrá un 2 % del total del gasto programable neto.
Esto equivale, precisó, a 90,844 millones de pesos.
«Dada la importancia de los primeros años de vida en el desarrollo físico y mental de todo individuo, llama la atención el reducido presupuesto destinado a la primera infancia, especialmente en lo referente a inversiones en educación inicial», lamentó Unicef.
Pese al aumento de 0.4 % en el presupuesto a educación, Unicef previó un «impacto negativo» para más de 1.5 millones de niñas, niños y adolescentes vulnerables que dejarán de recibir alimentación escolar por el recorte del 100 % de los recursos al Programa de Escuelas de Tiempo Completo (PETC).
También resaltó el recorte del 19 % en el Programa de Salud Materna y Reproductiva.
«Significa un retroceso en cuanto a los derechos de las mujeres, afectando el avance logrado en los últimos años en materia de violencia de género», alertó.
Unicef advirtió que el presupuesto y las decisiones políticas «definirán cómo se logrará superar los efectos negativos de la covid-19».
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