El «Rey del calipso» muere a los 96 años; Harry Belafonte, el mítico luchador de derechos civiles

Nació en Harlem. A los 17 años abandonó la escuela y se enlistó en la Marina, cuando trabaja como asistente de consejería le regalaban entradas para el teatro, esa noche encontró su vocación. Incursionó en la actuación, en el canto y años después en la lucha por los derechos civiles. 

CIUDAD DE MÉXICO (apro).-Aunque su música ya formaba parte medular de la historia de la música, la voz de Harry Belafonte alcanzó el nivel de mito cuando se estrenó la película Beetlejuice en 1988 y la canción ?The Banana Boat Song, Day-O se quedó para siempre en la historia pop. Pero la obra y la vida de Belafonte va mucho más allá de la icónica escena musical. Su contribución a lo largo de su vida contra el racismo y los derechos civiles, lo convirtieron en uno de los hombres que más luchó por la igualdad.

Nació en Harlem. A los 17 años abandonó la escuela y se enlistó en la Marina, cuando trabaja como asistente de consejería le regalaban entradas para el teatro, esa noche encontró su vocación. Incursionó en la actuación, en el canto y años después en la lucha por los derechos civiles. 

En 1953, ganó un premio Tony por su papel en la obra de Broadway Almanac. Calypso , su tercer álbum, lanzado en 1956, fue número uno durante 31 semanas y fue el primer álbum en vender más de un millón de copias. Un año después, apareció en el filme clásico Island in the Sun , que sugería una historia de amor interracial entre él y el personaje de la coprotagonista, la actriz Joan Fontaine.

En la década de los sesentas financió numerosas iniciativas para llevar los derechos civiles a los afroamericanos; luchó contra la pobreza, el apartheid y el Sida en África; mostró su simpatía por la Cuba de Fidel Castro y por el presidente Hugo Chávez de Venezuela.

Toda su vida alzó la voz contra el racismo. Una muestra de ello fue el discurso que pronunció al recibir el Premio Humanitario Jean Hersholt, ahí conjugó la historia del cine con la política y el discurso de odio que, desde la Casa Blanca se legitimó con la película El nacimiento de una nación. 

«Estados Unidos ha recorrido un largo camino desde que Hollywood en 1915 le dio al mundo la película El nacimiento de una nación . En todos los sentidos, esta obra cinematográfica fue considerada la mejor película jamás realizada. El poder de las imágenes en movimiento para impactar en el comportamiento humano nunca se evidenció más poderosamente que cuando, después del estreno de esta película, los ciudadanos estadounidenses se lanzaron a un alboroto asesino. Las carreras se pusieron una contra la otra. El fuego y la violencia estallaron. Bates de béisbol y garrotes golpearon cabezas. La sangre corrió en las calles de nuestras ciudades; y se perdieron vidas. La película también ganó la distinción de ser la primera película que se proyectó en la Casa Blanca. El entonces presidente Woodrow Wilson elogió abiertamente la película y, con el poder de esta unción presidencial, validó la brutalidad de la película y su visión groseramente distorsionada de la historia. Esto también inflamó aún más la división racial de la nación», expresó en aquella ocasión. 

Su labor y contribución a la lucha por los derechos civiles fue más allá de las palabras, fue él quien en 1963 sacó a Martin Luther King de una cárcel de Birmingham, Alabama, más tarde ayudó en la organización de la marcha en Washington que culminó con el mítico discurso «Tengo un sueño».

Su influencia musical logró que la primera grabación de Bob Dylan, tocando la armónica ocurriera en su disco Midnight Special. Además actuó en la ceremonia de inauguración presidencial de John F. Kennedy, lo había contratado Frank Sinatra. 

Belafonte fue el que organizó el disco benéfico de estrellas We Are the World, tuvo la idea de grabar una canción que reuniera a varios de los artistas musicales más conocidos de la generación. Michael Jackson encabezó esa lista y estuvo acompañado por Billy Joel, Bruce Springsteen, Bob Dylan, Ray Charles, Paul Simon, Tina Turner, Dayl Hall y Bob Dylan. 

Gracias a esa idea logró recaudar 63 millones de dólares para combatir la hambruna en África. Se prevé que Belafonte tenga una serie de homenajes que serán anunciado en los próximos días, como muestra de afecto por su lucha y su contribución para lograr un mundo más igualitario. 

Proceso