Fue un cambio muy radical: Bernardo González

González de ser encargado de la Procuraduría de Justicia, pasó a estar frente al municipio de Monterrey

Monterrey.-  El destino de Bernardo González lo llevó a lidiar con dos problemas que marcaron la historia del estado: la inseguridad y el Ayuntamiento de Monterrey luego de que se anulara la elección del primero de julio.

El abogado por la U-ERRE de 37 años de edad y padre de cuatro hijos pasó de ser Procurador de Justicia a presidente del Concejo de Monterrey, una suerte de alcalde.

En su oficina del Ayuntamiento, austera como él mismo, concede una entrevista mientras suena un piano con música clásica.

Su afeitada perfecta combina con el gesto serio, que rompe de repente con una sonrisa. «Es un cambio muy radical. Ocupé varios puestos en el 2018 y derivado de un cambio fue como se dio el cambio a la Seguridad Pública, pero sin duda sí te apasionas mucho.

«Finalmente estás defendiendo la seguridad de tu Estado, de tu gente, de tu familia. Así lo he vivido y planeo seguirlo haciendo», sostiene.

Designado por el Congreso local, asegura que la razón por la que pudo haber sido elegido fue la capacidad de ser imparcial.

«Fue atípico a lo que siempre sucede. Llega un presidente municipal con sus regidores, este es un Concejo Ciudadano, pero es un ejercicio de más democracia, aunque algunos de ellos pertenezcan a partidos políticos», apunta González.

Después de pensar unos segundos, el presidente del Concejo explica que no se ve en un futuro como alcalde, ni gobernador. Esta trayectoria le valió el respaldo de instituciones y personas, quienes lo apoyaron durante su postulación a la Fiscalía General de la República.

«Las cámaras empresariales, las universidades, siguen respaldando a tu servidor. Este es el capital que te llevas», dice. Padre de cuatro hijos, esposo y servidor público, cuenta que ha valorado los comentarios que recibe de parte de la gente fuera de eventos oficiales, ya que en redes sociales existieron usuarios que pidieron que se quedara en el puesto, luego de la jornada electoral extendida.

«Me quedo tranquilo con mi familia porque me dicen piropos a mi trabajo con ellos al lado. Hay que entender que la silla no es eterna. En algunas ocasiones (pidieron que me quedara), respondimos con agradecimientos, pero respondíamos que jurídicamente no procede», comentó entre risas.

Otro de los retos de su participación, explica que fue el corto tiempo en el que debió fungir como presidente, ya que esto no le permitió al Concejo avanzar en obras públicas.

«Tener limitados los proyectos a algo que dure sesenta días cuesta mucho. No hubo algún tema de crisis dentro de esta administración, para nada», expone.

A cuatro días de entregar el cargo a Adrián de la Garza y en retrospectiva, lo que más causó impacto en él fue detener su trabajo en la Secretaría de Seguridad, pero dice confiar completamente en su sucesor, Aldo Fasci.

«Hubo sentimiento por todo aquello que estábamos haciendo antes, yo confío mucho en el Secretario actual. Lo primero que le dije fue que no descuidáramos el programa para ayudar a los policías», acepta.

Ahora, Bernardo González ve a la Iniciativa Privada como una opción, además de dedicarle más tiempo a su familia.

SU HISTORIA

Nació en Monterrey, el 10 de enero de 1982.

Estudió Ciencias Jurídicas en la Universidad Regiomontana.

Asumió en 2015 el cargo de consejero jurídico del gobernador Jaime Rodríguez.

Prefiere escuchar música clásica en piano.

Asegura que el deporte le ‘hace falta’.

Su pasatiempo favorito es asar carne con su familia.

El mayor temor de González es a la muerte.

 

 

Fuente: ABC Noticias