Las Chivas soñaban con hacer un gran papel en el Mundial de Clubes, pero el Kashima Antlers los despertó de su fantasía, tras vencerlos 3-2, con remontada incluida.
El Rebaño comenzó de manera inmejorable su debut en el Mundialito con un gol que cayó, apenas, a los tres minutos del partido. Tras una gran jugada individual por la banda derecha, Isaác Brizuela envió un centro que remató solo Ángel Zaldívar a contrapié del portero coreano Kwoun Sun-Tae.
Con la ventaja tempranera, el conjunto rojiblanco se sintió cómodo, incluso, sin la posesión del balón. El cuadro nipón no encontraba la llave para pasar del medio campo y no afectó la portería de Raúl Gudiño ni una vez en el primer tiempo.
Orbelín Pineda sacó un disparo de fuera del área cuando morían los primeros 45 minutos, pero el travesaño le negó el gol que hubiera dado completa tranquilidad.
Para el segundo tiempo, el Kashima sorprendió a la zaga tapatía. La primera llegada clara de los japoneses terminó en gol. Shoma Doi desbordó por la banda izquierda y metió una diagonal para Ryota Nagaki, quien venía de hacer un pique desde medio campo y solo empujó el balón a las redes.
Con el empate, los nipones se echaron para atrás en busca de un contragolpe, pero las Chivas contrarrestaron bien esta situación durante los siguientes minutos. El partido se volvió ríspido en medio campo, pero al minuto 70 llegó la polémica.Michael Pérez hizo contacto con Shoma Doi y se marcó el penal, de manera dudosa. Serginho convirtió con clase la pena máxima a su izquierda, con engaño incluido a Gudiño. Parecía que el sueño estaba terminando.
Los minutos siguieron transcurriendo sin peligro. Las Chivas no pudieron crear otra oportunidad de gol y el Kashima estaba cazando un contragolpe. La estrategia de los japoneses tuvo resultados y al minuto 82, Hiroki Abe anotó un golazo, tras un disparo al poste más lejano dentro del área.
En los últimos minutos, Chivas se lanzó al ataque con todo lo que tenía y consiguió un penal al minuto 90 que fue bien marcado con ayuda del VAR. Alan Pulido falló, pero en el contrarremate marcó el gol que hizo más decoroso el marcador.
Ahora, el Kashima enfrentará al Real Madrid en las semifinales y las Chivas buscarán ganar el siguiente partido para no ser el último lugar del torneo.
Fuente: Marca