El conflicto en Medio Oriente puede provocar un aumento en el precio de energéticos y fertilizantes, lo que se traducirá en una mayor inflación; además del impacto geopolítico.
El 7 de octubre de este año será recordado como el día en que comenzó un nuevo capítulo en la guerra entre Israel y Palestina.
Hace un mes tuvo lugar un ataque de parte del grupo terrorista Hamás en el sur del territorio israelí, lo que provocó la respuesta del gobierno de Israel y el recrudecimiento del conflicto con Palestina.
Tal como ocurrió con el conflicto entre Rusia y Ucrania en 2022, el impacto que se espera por lo ocurrido en Israel no solo abarcará la parte política, sino que también se resentirá en la económica.
“El tema de Israel y Palestina nunca ha quedado resuelto y después de 65 años, el escenario es perfecto para que resurja. Es un rebrote de un virus y, sin duda, el impacto geopolítico y geoeconómico puede convertirse en una pandemia en el ámbito militar y de otras cuestiones”, apuntó Aribel Contreras, académica de la Universidad Iberoamericana.
Impacto económico
Todo conflicto que tenga lugar en Medio Oriente tendrá un impacto al alza en el precio de energéticos, particularmente en el petróleo, así como en los fertilizantes.
El aumento en el precio de materias primas puede ser una buena noticia, pero también tiene un lado B, y este es que empuja al alza la inflación, particularmente en el precio de los alimentos, por mayores precios de fertilizantes. En los últimos meses en México y países como Estados Unidos el índice de precios al consumidor ha venido bajando.
En México, la inflación ha pasado de 8.7% en agosto de 2022, a 4.26% en octubre de este año, de acuerdo con el Inegi.
Un aumento en la inflación hará que los bancos centrales mantengan una política monetaria restrictiva por un periodo más largo.
El rol que tomen países de Medio Oriente como Irán, Arabia Saudita y Qatar, lo que tendrá un efecto directo sobre el precio del petróleo.
Otro efecto del conflicto que tienen en el mundo este tipo de conflictos se relacionan con un aumento en la prima de riesgo, es decir, “hay un aumento en el costo de capital por vía de la percepción de riesgo y las perspectivas de futuro; aumentan los riesgos de lo que pueda ocurrir en el mundo y los negocios”, explicó Alejandro Garza, fundador de Aztlan Equity Management. El aumento en la prima de riesgo se traduce en que bajen los precios de los activos, en las bolsas a nivel mundial.
En octubre los mercados a nivel global registraron bajas de entre 2% y 5%, precisó Garza.
Para cubrirse de estos riesgos, los inversionistas pueden optar por instrumentos de renta fija, como los Cetes, así como el sector de inmuebles industriales, que se ha visto beneficiado en México y el sur de Estados Unidos por el nearshoring, recordó Alejandro Garza.
TLC con México
Israel y México firmaron un tratado de libre comercio en 2000.
Los productos que más le vendió México a Israel en 2022 fueron: teléfonos -móviles y de otras redes inalámbricas-, automóviles y vehículos para el transporte de personas y mercancías, máquinas y unidades de procesamiento de datos; mientras que lo que más le compra son circuitos electrónicos integrados, partes y accesorios de máquinas y abonos minerales o químicos, de acuerdo con DataMéxico.
El año pasado, México hizo importaciones a Israel por 991 millones de dólares y exportaciones por 250 millones.
Cambios globales
En los últimos años se ha visto una reconfiguración a un mundo multipolar.
Desde el año pasado, la guerra en Ucrania trajo nuevas alianzas y desalianzas a nivel global.
En esta ocasión, resurgieron actores como los grupos terroristas Hamás y Hezbolá, explicó Contreras de la Universidad Iberoamericana.
“Entre más países se involucren, mayores consecuencias geopolíticas va a haber”, advirtió Contreras.
Un cuestionamiento es hacia dónde se moverá Egipto, país que colinda con Israel y con la franja de Gaza, particularmente con el paso fronterizo Rafah, clave para la proveeduría de alimentos, medicinas y que puede ser utilizado como corredor humanitario, detalló Contreras.
Turquía también es un país que puede tomar partida por un bando, así como Irán, ya que “, de acuerdo con información estadounidense, este gobierno ha venido financiando a Hamás y Hezbolá, y se considera un archienemigo de Israel”, dijo la académica de la Ibero.
Rusia, aunque está enfocada en organizar un ataque a Ucrania en invierno, estará a la espera de que naciones como Irán se involucren.
Mientras tanto “China estará observando cómo se mueven las fichas, y no es casualidad que haya metido a Irán a los BRICS”, dijo Contreras.
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