Mejora expectativa para futuros del peso en Chicago

En febrero, la moneda mexicana se ha mantenido con una ligera apreciación de 0.34% frente al dólar, a 20.5425 unidades.

Las posiciones netas especulativas del peso mexicano se ubicaron, por segunda semana consecutiva, en terreno positivo, en un panorama de mayor estabilidad para la moneda mexicana.

Al cierre del viernes pasado, los contratos de futuros del peso en la Bolsa de Comercio de Chicago (CME por sus siglas en inglés) se ubicaron en 1,200 contratos, cada uno por 500,000 pesos, y la semana previa estaban en solo 700 contratos a favor del peso.

Luego de haber alcanzado su peor nivel desde enero del 2017 hacia el cierre de diciembre, las posiciones de los inversionistas relajaron las presiones hacia el peso, favorecidas por las decisiones del Banco de México (Banxico) de aumentar la tasa de interés, y menores factores de volatilidad en el mercado de divisas.

De hecho, en febrero, el peso se ha mantenido con una ligera apreciación de 0.34% frente al dólar, ubicándose en 20.5425 unidades por billete verde el viernes pasado, respecto a los 20.6134 pesos por dólar en que cerró enero.

Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Banco Base, dijo que la apreciación de la moneda mexicana en las últimas dos semanas ha sido resultado de la última decisión de Banco de México de subir la tasa de interés, así como debilidad del dólar luego de las cifras de inflación en Estados Unidos y las tensiones geopolíticas entre Rusia y Ucrania.

“La expectativa de que Banco de México seguirá subiendo la tasa de interés objetivo en caso de ser necesario, debido a los riesgos al alza para la inflación, que para enero se ubicó en una tasa anual de 7.07%, ligeramente por arriba de las expectativas del mercado, favoreció al peso”, precisó la especialista.

Continúa la volatilidad

Jorge Gordillo, director de Análisis Económico en CIBanco, comentó que “la volatilidad sigue instalada en el mercado cambiario mexicano, a pesar de que aumentaron las apuestas de una Fed más agresiva respecto a la subida de tasas de interés, y de declaraciones de funcionarios regionales apoyando mayores alzas. El peso fue impulsado también por la decisión de Banxico de subir su tasa de fondeo en 50 puntos base”.

Gabriela Siller resaltó que en la semana, el índice dólar mostró un incremento de 0.22%, “debido a que en Estados Unidos la inflación se ubicó en una tasa anual de 7.5% en enero, superando las expectativas del mercado y alimentando la especulación de que la Fed podría subir su tasa de interés en 50 puntos base en marzo o inclusive hacer incrementos a la tasa en las siete decisiones restantes en el año”.

Agregó que el índice dólar tuvo un avance adicional en la sesión del viernes, luego de que la Casa Blanca advirtió sobre la posibilidad de que Rusia realice una ofensiva militar en Ucrania tan pronto como esta semana, pidiendo además a estadounidenses viviendo en Ucrania que abandonen el país tan pronto como sea posible.

En lo que va de febrero, el índice dólar, que mide la fortaleza de la moneda estadounidense frente a una canasta de seis divisas de referencia, pierde 0.48% a 96.08 puntos.

Durante la presente semana “el mercado estará atento a la evolución de las tensiones geopolíticas entre Rusia y Ucrania. Por otro lado, será relevante la publicación de las minutas de la Reserva Federal, así como de datos económicos incluyendo las ventas minoristas y la producción industrial de Estados Unidos, lo que servirá para evaluar la fortaleza de la recuperación económica”, finalizó Siller.

Por su parte, Alejandro Padilla, director general adjunto de Análisis Económico y Financiero de Banorte, dijo que “la volatilidad del dólar fue resultado de un ajuste en las expectativas de las tasas de interés en otras regiones; no obstante, esta podría ser temporal ante la necesidad de ajustes al alza en la tasa de referencia y la posibilidad de un sesgo más hawkish por parte del banco central estadounidense”.

El especialista agregó que “un panorama más complejo en la inflación global y tensiones geopolíticas ante la posibilidad de una invasión rusa a Ucrania resultaron en una mayor volatilidad y fortalecimiento del dólar, con el índice dólar avanzando 0.6% en la semana y un desempeño mixto entre divisas desarrolladas y emergentes”.

El Economista