Monterrey se ha convertido en una cámara de gases

* El ambientalista Guillermo Martínez Berlanga acusa indiferencia e inacción del gobierno de Jaime Rodríguez Calderón para reducir contaminación

Monterrey, 28 May (Notimex).- Los graves problemas de contaminación que registra la zona Metropolitana de Monterrey, que han llevado aplicar varias alertas de contingencia ambiental, son responsabilidad del gobernador Jaime Rodríguez y su gabinete que ha incumplido con la instalación de nuevas estaciones de monitoreo, y no de la tradición de la carne asada.

Así lo señaló el ambientalista regiomontano, Guillermo Martínez Berlanga, quien acusó directamente al gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, por la grave contaminación que golpea a la zona y de provocar, con su indiferencia en el tema, la muerte de bosques y especies animales en la región.

En entrevista con Notimex, sostuvo tajante que Rodríguez Calderón, en el aspecto de la contaminación “es el único responsable, es el responsable de que se cumpla la Constitución en el estado, el gobernador”

“Que dice la Constitución en el estado?, que tengo derecho a salud, que tengo derecho a un medio ambiente sano y que tengo derecho a respirar un aire limpio, ninguna de las tres cumple el gobernador», subrayó.

Y siguió: “Si el gobernador le quiere hacer al tema del carbón -por la tradición de las carnes asadas en la región- yo le ayudo, pero vámonos a la industria, vamos a todas las talas clandestinas que hay de huizache y de mezquite».

Estas talas clandestinas, aseguró, están contribuyendo a los efectos del cambio climático y a la desertificación del estado, “no quieran inventar chiles al señor Clemente Jacques “.

Respecto a la recomendación de Rodríguez Calderón, para que los regiomontanos dejen de preparar carnes asadas con carbón y con ello contribuir a que baje la contaminación, el ecologista respondió:

“El gobernador tendría que trabajar en un circo, a la mejor tiene allí más posibilidades como payaso, que por cierto es bastante malo como payaso y aparte de ignorante», dijo.

Manifestó que “el carbón no es la bronca, lo que es la broncota, es la industria del carbón que proviene del mezquite y del huizache”.

“Nos aventamos aquí 30 mil árboles por mes, en una industria criminal, que contratan los empresarios del carbón, a indígenas, madres solteras, les dan 70, 80 pesos de sueldo a la semana y una despensa».

Ahí trabaja toda la familia, indicó, respirando dioxina y respirando veneno, apagando el carbón y las cenizas con los pies y con las manos, no tienen ni herramienta.

Puntualizó que “esa es la industria perversa, la que tendría que sacar el gobernador, en lugar de decir pen…”.

Refirió que recientemente acudieron al Congreso del estado a pedir un juicio político en contra del secretario de Desarrollo Sustentable del estado, Manuel Vital Couturier.

“Esto lo hicimos precisamente basados en algunas de las causales, como la discrecionalidad con que el señor maneja el Sistema Integral de Monitoreo Ambiental, que es el SIMA», expresó.

Reclamó que “no puede ser que, ante estas condiciones, aparte de que nos faltan diez estaciones de monitoreo que no existen, reubicar cuatro que ya existen, que están mal ubicadas, pues todavía sigan engañando y sigan dando las contingencias 48 horas después de sucedido el evento de la contaminación».

Esto, advirtió, en cualquier país civilizado, pues sería un delito penal, están alterando las cifras de la contabilidad, pues tiene que ir a la cárcel o tiene que ser investigado.

“Justamente lo que está pasando aquí en Nuevo León», subrayó.

Comentó que “tenemos 13 estaciones de monitoreo ambiental, debemos tener 22, el señor (Vital Couturier) nos promete, hace un año, cuatro meses, 13 estaciones más, ya con todo y precio y facturas, compradas, pero no las encontramos en todo Nuevo León».

Y las cuatro que hay, agregó, que reubicaron, una está dentro de Agua y Drenaje de Monterrey, y la otra está adentro de Plaza Serena, que son dos bosques, y esas nunca van a medir la contaminación.

El ambientalista mencionó que lo mismo pasa con la que está en la entrada del Parque de la Pastora, que es un parque ecológico y un zoológico, tampoco va a pasar nada.

Resaltó que en un mes que tiene el director de este parque, ya se murieron una elefanta, un halcón hembra y así se han estado muriendo animales.

“Y a eso se le agrega que el año pasado, de 185 denuncias ambientales, no contestaron ninguna”, dijo.

El (Vidal Couturier), es parte de la complicidad con los empresarios, depredadores y contaminadores que destruyen las montañas, como “las grandes empresas acereras, las grandes empresas cementeras y todos los que nos están envenenando, la Industria del Alkali”.

El especialista expuso que se contabilizan 77 empresas de alto riesgo contaminantes aquí en Nuevo León, según el Instituto Internacional de Ecología.

Entre ellas, apuntó, “está (la acerera) Ternium, por la avenida Universidad, una empresa argentina que hace lo que le pega la gana en materia ambiental aquí en Monterrey, contiguo al campus de la Universidad Autónoma de Nuevo León».

Martínez Berlanga consideró que, ante la gravedad de la contaminación en la metrópoli, “necesitas parar la actividad económica, necesitas parar el transporte, las escuelas».

Una contingencia ambiental, dijo, “te previene de la muerte, te previene de que tu organismo se vaya deteriorando en partes, primero son tus mucosas, después son los pulmones, después es tu cerebro, luego tu corazón y luego te vuelves hasta diabético».

Alertó que “la zona metropolitana de Monterrey se ha convertido en una cámara de gases”.

En el gobierno de Nuevo León “nadie está trabajando, es una simulación de todos, vean lo que están haciendo las pedreras, y no nos echen la culpa a los ecologistas, pues ni modo que nada más los ecologistas respiremos».

“La biodiversidad del planeta está en riesgo, si ya se acabaron los patios en Fundidora, ya se les están muriendo hasta las ardillas», expuso.

Opinó que urge que todo el sistema de monitoreo ambiental sea echado a la basura, “para eso hay que invertirle lana”.

A causa de la contaminación, la Secretaría de Salud estatal refirió que a febrero de este año se tenía un aumento de 10 por ciento en las consultas y afectaciones relacionadas con la concentración de partículas contaminantes.

Especialistas médicos alertaron que los altos niveles de contaminación pueden generar rinitis, asma, enfermedad pulmonar obstructiva (Epoc) o fibrosis pulmonar.

Lo anterior, pues estudios reportan que las partículas en suspensión de menos de 2.5 micras (PM2.5) son más dañinas para la salud, debido a que tienen la capacidad de absorberse a la sangre y ocasionar problemas en el aparato circulatorio y corazón.

A su vez, la presidenta de la Comisión de Medio Ambiente del Congreso del estado, Ivonne Bustos, expresó que este tema es muy grave, el cual han venido denunciando a lo largo de dos periodos legislativos.

“Todas las fracciones nos hemos pronunciado en contra de la reacción que hay para la emisión de contingencias ambientales y la falta de acciones, que nos preocupa sobremanera», señaló.

Denunció que “se está exponiendo demasiado a la población y nuestra obligación como servidores públicos es proteger a la población en el sentido más amplio tal y como nos los mandata la Constitución federal en el artículo primero constitucional”.

“Lo único que queremos es resolverle a la sociedad, la gente viene cada día aquí con quejas de que va minando cada vez la salud de las personas, de la familia, cada día, asmas, alergias, gripes prolongadas”, añadió.

Manifestó que las personas que tienen enfermedades con más afecciones como son el cáncer o diabetes, se les van agravando en un momento, se disparan, por eso es que se llaman las muertes relacionadas con contaminantes, se llaman muertes prematuras.

“Te destruyen la salud de manera progresiva en muy poco tiempo”, alertó la legisladora.

Por su parte, la Cámara de Industria de Transformación (Caintra) advirtió que los altos niveles de contaminación ambiental del 2017 le causaron al sector manufacturero de Nuevo León pérdidas de productividad por unos 556 millones de pesos.

En su momento, el expresidente del organismo privado, Juan Ignacio Garza Herrera, resaltó la gravedad del problema con una fuerte repercusión en la salud de la población, pues “las altas concentraciones de contaminantes como PM10, PM2.5 o monóxido de carbono, exacerban las enfermedades respiratorias y cardiovasculares».

 

FUENTE: Notimex