Por andar poniendo en duda el grado académico de nuestro noble gobernador, el rubio Samuel “Mattel” García, más de cuatro de los cinco miembros de mi audiencia me regañaron y me obligaron a precisar: El amadísimo líder Samuel “Lili Ledy” García sí realizó, y con éxito, todos sus estudios, hasta los superiores.
El club de fans del “ex caddy favorito de papá” me hizo notar que, a diferencia de otros políticos, “Pedro Bello”, como lo llama el periodista Omar Elí Robles, cursó estudios desde párvulos y kínder, hasta carreras y doctorados siempre en tiempo y forma.
Por ejemplo, me aseguran que Samuelín terminó en el cuadro de honores su titulación en la Real y Pontificia Universidad Julio Cepeda. Sí, esa cuyo campus se encuentra en la avenida Gonzalitos.
Pero ávido de conocimiento, inició enseguida el estudio de una maestría basada en la vida de esos héroes infantiles Barbie y Ken, en la prestigiosa escuela superior Toys r’ Us, cuando esa institución tenía su campus en McAllen, por el expressway 83.
El joven Mattel pasó algún tiempo como quien dice, quemándose las pestañas, también en prestigiadas instituciones como la FAO Schwarz, la Lego Store, la Harry Potter Store, la Disney Store y la Nintendo New York, puras jugueterías de alta calidad en conocimientos y políticas educativas.
Revisar ese brillantísimo currículo da cuenta de por qué las decisiones tan trascendentales que este joven estadista, ha tomado para transformar la entidad que ahora ya no se llama Nuevo León, sino Nuevo Nuevo León.
Del leoncito en el logo, pues luego hablamos, porque el prócer anda escogiendo disfraz y quiere uno de “tortuga ninja”, porque no le gustaron las olas de críticas cuando se disfrazó de Buzz Ligth Year.
Lo que sí es cierto, es que este joven mandatario maravilla lo trae muy preocupado no la crisis del agua, ni los feminicidios, ni la ola de Covid, sino que lo que le apura es que ya a estas alturas del partido no exista una fecha que justifique las ofertas de baratas en jugueterías… Y la Navidad queda muy lejos.
Pero ya comisionó a Glenn Villarreal Zambrano, porque no da una en comunicación, a ver si se le ocurre algo en la nueva tarea de ver cómo jugar con las fechas.