No me llamo Felipe ni me apellido Calderón

Presidente, no me vaya a venir a decir que soy un cinicazo -como lo hizo con Felipe Calderón- por escribir en mis columnas sobre el fusilamiento de 17 en Michoacán.

LES PLATICO: TAMPOCO CONTRATÉ A GENARO GARCÍA LUNA COMO SECRETARIO DE SEGURIDAD PÚBLICA.

Menos emprendí guerra alguna contra las bandas de narcos ni comprometí recursos del erario en una lucha perdida de origen ni arriesgué la vida de millones de mexicanos.

No tengo nada qué ver con los cárteles de la droga ni pesa sobre mí sospecha de haber corrompido a las estructuras del gobierno federal, responsables -o más bien, irresponsables- de la seguridad pública.

PRESIDENTE

Calderón DETONA aquí.

Debido a esas razones y a muchas más, por favor, no me vaya usted a venir a decir que soy un cinicazo -como lo hizo con Felipe Calderón- por escribir en mis columnas sobre el fusilamiento de 17 personas en Michoacán.

En su mañanera de este martes se lamentó de que los medios de comunicación le demos vuelo a noticias como esa.

No señor, no tenemos qué hacerlo, el hecho voló por sí solo y hoy es tan o más sabido en el mundo como lo que ocurre en Ucrania.

México está siendo conocido ahora más por estos hechos sangrientos, que por las maravillas naturales que dieron realce a nuestro turismo hace ya buen tiempo.

Somos tema de conversación -negativo- en foros tan diversos como las «benditas redes sociales» -tal cual usted las llama- en medios, chats y foros de toda índole en el mundo entero.

MÉXICO ESTÁ EN GUERRA

Este es el que dice que los criminales se sigan matando, siempre y cuando no afecten a los civiles. Foto gobierno de NL 2015-2021.

México vive una guerra y mientras eso sucede, usted, Andrés Manuel, sin quererlo está siendo modelo de disculpa para funcionarios alucinados como Aldo Fasci, que todavía es secretario de seguridad pública en NL, y quien quien dice que las corporaciones policiacas que él «comanda» tienen como prioridad en la lucha entre delincuentes, evitar que los ciudadanos salgamos afectados.

No le hace que se maten entre los malos, lo que a éste tipo le interesa es que deje de haber bajas entre la población civil.

Y eso, señor presidente, se lo está copiando a usted, porque sigue confiando en que las armas de los delincuentes tarde o temprano van a ser sustituidos por los libros, los balazos por los abrazos y confía en que los mexicanos les demos el perdón a los malandros que se han adueñado de México. 

Entonces, presidente, con el debido respeto, permítame decirle que es inaudito el atrevimiento del crimen organizado.

Fusilar en plena calle a 17 personas y luego darse el tiempo para limpiar de sangre las banquetas y llevarse los cuerpos, es digno de una nación sin ley.

¿Dónde están las fuerzas policiacas federales, estatales y municipales? Dónde está el ejército? ¿Dónde los marinos? Dónde la Guardia Nacional?

LA TROPA YA ESTÁ HASTA LA MADRE

Foto DETONA.

Suelo platicar con cuanto militar se me atraviesa en el camino.

Respetuoso siempre, no resisto la tentación de preguntarles cómo se sienten con sus mandos militares, que los mandan a hacer mandados cual recaderos y distrayéndolos con labores que de tan menores, ofenden su uniformes y su orgullo como fuerzas castrenses.

La mayoría de ellos acceden. Casi todos me piden no mencionar sus nombres. Algunos, muy valientes, aceptan la foto a sabiendas de que como medio de comunicación que soy, puedo publicarlas y me dan su anuencia.

«Malo no es que salgamos en los periódicos»,me dicen. 

«MALO ES QUE NOS TRAIGAN DE ALBAÑILES Y RECADEROS»

Me dijo un cabo al que me encontré en uno de los puestos militares en el «Espinazo del Diablo» hace dos años y medio.

Tengo contacto con distinguidos militares en retiro y la cosa pinta igual.

No les gusta el trato que se les da a los soldados de piso -como se hacen llamar- porque se está denigrando la figura del militar.

ESTÁN PREPARADOS, PERO NO LOS DEJAN

Foto por Noé Sandoval Vargas, exclusivas para DETONA.

Nuestro Ejército está más que preparado para entrarle a la lucha contra el crimen organizado.

Pero no los dejan.

No tendría que ser un guerra, aunque vivimos ya datos de países en guerra. Es más, superamos las muertes violentas que registra actualmente el conflicto armado entre Rusia y Ucrania.

Así que, presidente, aquí me tiene, reclamándole con el debido respeto, que tenga su gobierno sumido a México en este desmadre.

Desde ésta irreverente trinchera -que cada vez adquiere más connotaciones bélicas, por las amenazas y hostigamientos que recibimos «los de la prensa»- le reitero convencido: PATRIOTISMO CON PERIODISMO, crítico, severo, acucioso, vehemente, rijoso y agitador, a veces, pero noliace.

CAJÓN DE SASTRE

«No hay de otra», dice la irreverente de mi Gaby.