Patrulla Fronteriza estadounidense dispara balas de goma a venezolanos en Ciudad Juárez-El Paso

Lo que comenzó como una manifestación pacífica y en busca de diálogo por venezolanos terminó con una serie de disparos de la patrulla fronteriza en la frontera México-EU.

Una marcha pacífica de un grupo de migrantes venezolanos sobre el bordo del Río Bravo, en Ciudad Juárez, terminó intempestivamente cuando agentes de la Patrulla Fronteriza les dispararon con balas de goma para dispersar lo que consideraron, un intento de cruce masivo a El Paso, Texas.

Los sudamericanos acudieron a la manifestación alentados por el artista local Roberto Márquez, quien preparó una gran bandera estadounidense con la frase “We the migrants built America”; sin embargo, al cruzar el afluente, para, presuntamente dialogar con los agentes que vigilaban la escena, fueron dispersados con los proyectiles.

Los hechos ocurrieron poco después del mediodía, cuando cerca de 30 personas iniciaron la caminata a la altura del denominado “puente negro”, cerca del cruce Paso del Norte, de donde recorrieron cerca de cinco kilómetros al Parque Las Tortugas, en el lecho del río.

Ya en el lugar, algunos miembros del contingente consideraron oportuno cruzar al otro lado para entablar una conversación con los agentes de la Patrulla Fronteriza, quienes de inmediato sometieron a dos de los manifestantes.

En respuesta, uno de los migrantes de origen venezolano, habría lanzado una piedra a los efectivos, quienes en respuesta, activaron sus armas para dispararles las pelotas de caucho, por lo que en segundos, orillaron al grupo de sudamericanos a regresar de nuevo al lado mexicano.

Tras el ataque, los manifestantes reclamaron el actuar de los agentes, quienes para ese momento ya contaban con el apoyo de un mayor número de unidades y de uno de los helicópteros de la corporación.

Al no lograr el diálogo que pretendían, poco a poco los migrantes se retiraron del lugar para regresar al “puente negro”, donde desde hace dos semanas mantienen un campamento, a la espera de que el gobierno estadounidense cambie su postura y reconsidere la aplicación del Título 42.

Tras los hechos, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dijo que ya se había solicitado información a Estados Unidos y reiteró la necesidad de mantener protocolos para garantizar la dignidad e integridad de todas las personas en la frontera.

“México reitera que el respeto a los derechos humanos de las personas en situación de movilidad debe ser la base de la actuación de todas las autoridades migratorias y rechaza cualquier potencial uso excesivo de la fuerza”, dijo Roberto Velasco Álvarez, jefe de la Unidad para América del Norte de la SRE.

La disposición establece que los venezolanos que cruzaron la frontera vía terrestre ilegalmente, deben ser regresados a México, normativa que tuvo su origen durante la pandemia de COVID-19, que niega el derecho a solicitar asilo en territorio estadounidense.

Los migrantes venezolanos que reúnen los requisitos para recibir el permiso condicional humanitario, son los que tienen la posibilidad de ingresar vía aérea.

El Financiero