La condena a muerte de la mujer de origen mexicano está siendo cuestionada en medio de crecientes dudas sobre si mató a golpes a su hija.
Melissa Lucio se enfrenta a una ejecución el próximo 27 de abril de 2022 en Texas (Estados Unidos) por el asesinato de su hija Mariah, de 2 años, un crimen que ella niega y que políticos, celebridades, organizaciones civiles, abogados, fiscales y diversas personas, dicen nunca ocurrió.
La condena a muerte de la mujer de origen mexicano está siendo cuestionada en medio de crecientes dudas sobre si mató a golpes a su hija. Lucio fue declarada culpable de homicidio punible con la pena capital en 2007, en la ciudad de Harlingen, en el sur de Texas.
Melissa Lucio sería la primera latina en ser ejecutada en el estado de Texas y la primera mujer desde 2014. Sólo 17 mujeres han sido ejecutadas en Estados Unidos desde que la Corte Suprema levantó su prohibición a la pena capital en 1976, la más reciente en enero de 2021.
¿Quién es Melissa Lucio?
-Melissa Lucio nació el 18 de julio de 1968 en Lubbock, Texas (EU), en el seno de una familia católica mexicana-estadounidense. Tiene 53 años, de acuerdo con información de la organización The Innocence Project.
-El mismo organismo dice que Melissa y su familia viven por debajo del umbral de la pobreza. Sus primeros recuerdos de la mexicana son de su madre luchando por escapar de los golpes de su pareja.
-Sus parientes mayores comenzaron a agredir y abusar sexualmente de Melissa desde que tenía 6 años. Fue abusada sexualmente en repetidas ocasiones.
–Se casó a los 16 años con la esperanza de escapar de su entorno abusivo.
-En el momento del accidente de Mariah, Melissa tenía 12 hijos de entre 2 y 15 años y estaba embarazada de mellizos que finalmente daría a luz en prisión y tendría que dar en adopción.
“La muerte de Mariah fue una tragedia, no un asesinato… Si esta ejecución se lleva a cabo será un mensaje totalmente devastador. Enviaría el mensaje de que la inocencia no importa”, dijo Vanessa Potkin, abogada del equipo defensor de Lucio en la organización Innocence Project.
El Financiero