Se acercan las fiestas patrias, por ello, uno de los relatos más interesantes de la historia de México es el de los Niños Héroes, el cual se remonta al 13 de septiembre de 1847, cuando tuvo lugar la batalla del Castillo de Chapultepec, de la que data la famosa historia.
El suceso ocurrió cuando México estaba en guerra con Estados Unidos (entre 1846-1848), donde la República perdió una gran parte de territorio.
- El día 13 de septiembre, el Ejército de Estados Unidos llegó a la capital del país; posteriormente arribó a las laderas del cerro de Chapultepec: en el recinto no había muchos soldados.
Aquel 13 de septiembre, luego de dos días de feroz bombardeo, los invasores atacaron el Castillo de Chapultepec. Al pie de la rampa, y debido a su gran superioridad numérica, destrozaron al batallón activo de San Blas, muriendo su jefe, el coronel Felipe Santiago Xicoténcatl, y casi todos sus soldados, según datos del Gobierno de México.
Los invasores, las tropas de Estados Unidos, avanzaron con banderas desplegadas hacia el castillo, donde los últimos soldados en quedar eran solamente jóvenes: Juan de la Barrera y los cadetes Agustín Melgar, Francisco Márquez, Fernando Montes de Oca, Vicente Suárez y Juan Escutia, quienes defendieron el Castillo de Chapultepec.
Entre las historias que hay alrededor de los Niños Héroes está la que dice que Juan Escutia se lanzó de lo alto del Castillo para proteger la bandera; sin embargo, también hay relatos donde, supuestamente, aseguran que los héroes no existieron.
Luego de la batalla, los cadetes fueron conocidos como los Niños Héroes, pues pasaron a la historia por su valentía en la defensa del Castillo contra el Ejército de Estados Unidos.