El panista también alegó que la coalición Va por México fue la que defendió la Constitución y la soberanía de México
Las consecuencias por la votación de la Reforma Eléctrica siguen dando de qué hablar debido a los constantes desplantes de los actores políticos involucrados.
Ya que desde que los legisladores de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) catalogaron a los diputados de las bancadas contrarias como “traidores de la patria” al presuntamente velar por los intereses de empresas extranjeras en lugar de la soberanía nacional, como han argumentado los miembros del partido guinda.
Lo anterior causó que distintos políticos de las bancadas de los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD) se manifestaran en contra de las descalificaciones llamándolas como “discurso de odio”.
Entre ellos el vicepresidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel Miranda, fue uno de los más férreos críticos en contra del “discurso de odio” en contra de los legisladores.
En rueda de prensa se lanzó contra las declaraciones de los morenistas con respecto a las descalificaciones hacia los diputados. Ante los medios señaló que la campaña emprendida, aparte de ser un discurso de odio, aclaró que se trataba concretamente de “discriminación, porque están discriminando opiniones distintas, opiniones críticas”.
La Reforma eléctrica fue rechazada por los diputados de la oposición, lo que desembocó en una fuerte confrontación entre legisladores EFE/LUIS TEJIDO
Mencionó que esto iba en contra de la constitución, del artículo primero específicamente, en el que indicó que “nadie puede ser discriminado por sus ideas, sean cual estas fueren”.
También agregó que en la votación del pasado 17 de abril, buscaron defender los artículos 25, 27 y 28, y que esa defensa estaba acorde con la votación de la Ley de la Industria Eléctrica en la que 7 ministros votaron en contra del proyecto que buscaba dar prioridad a la producción de electricidad por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“Todo esto es una farsa y una mentira porque los que estábamos defendiendo la constitución, éramos nosotros (…) es justamente el mundo al revés y por supuesto que la gente no va a caer en esta mentira que quieren construir”, aseveró el legislador del blanquiazul.
“Sin un diálogo productivo, sin una apertura real, sin nuestras propuestas es imposible que pase una reforma electoral como la que quieren presentar o sobre la militarización del país como lo quiere formular el presidente López Obrador. No hay manera”
Además, dijo que en el caso de los legisladores, estaba además el artículo 61 en el que se establece que no se puede “en cualquier forma impedir que fijemos una posición como lo hicimos en el caso de nuestra votación en contra de la Reforma constitucional que envió el presidente López Obrador”.
Mario Delgado y Citlalli Hernández fueron los principales impulsores de las descalificaciones en contra de los diputados FOTO: DANIEL AUGUSTO /CUARTOSCURO.COM
Dicho artículo establece que las opiniones los “diputados y senadores son inviolables por las opiniones que manifiesten en el desempeño de sus cargos, y jamás podrán ser reconvenidos por ellas” además de que el presidente de la cámara debe velar por el respeto al fuero constitucional de los mismos.
Por último, mencionó que los embates han solidificado la coalición Va por México y “que le sigan, porque entre más aprieten, más solida, más fuete va a ser nuestra coalición”.
Por otra parte, el líder nacional de Morena, Mario Delgado, junto con otros integrantes del gobierno de la Cuarta Transformación (4T) han defendido la campaña emprendida en contra de los diputados señalando que los ciudadanos deben conocer a aquellos quienes se opusieron a la Reforma Eléctrica.
Delgado negó a través de su cuenta oficial de Twitter la existencia de algún discurso de odio y argumentó que los legisladores son servidores públicos, por lo que debían rendir cuentas.
“Los legisladores no son cabilderos anónimos, son servidores públicos. Todas las sesiones, debates y votaciones son públicas. Sus salarios se pagan con los impuestos del pueblo al que constitucionalmente representan y le deben rendir cuentas. El que nada debe nada teme”, señaló el morenista.
Info BAE