Es obvio lo que quieren hacer, de nuevo sus ataques son tan burdos como inofensivos. Los números que deberían preocuparles son los de las encuestas, publicó la candidata presidencial en sus redes sociales.
CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- Claudia Sheinbaum, candidata a la presidencia de la República por la coalición Sigamos Haciendo Historia, conformada por Morena, PT y PVEM, denunció que ha recibido llamadas y mensajes de odio en su celular, después de que filtraron su número de teléfono celular en redes sociales.
Debido a esta situación, indicó en una publicación que cambiará de número telefónico.
“El día de hoy he estado recibiendo llamadas sin parar y mensajes de odio (como que el que muestro) pues alguien publicó mi número de teléfono celular en redes sociales. Es obvio lo que quieren hacer, de nuevo sus ataques son tan burdos como inofensivos. Los números que deberían preocuparles son los de las encuestas (emoji de risa). A cambiar el número de teléfono. Que tengan buen día”, escribió en su cuenta de X.
Después de que una reportera de Univisión confrontó al presidente Andrés Manuel López Obrador por haber dado a conocer su número celular que ella misma expuso en una carta donde le hizo varias preguntas sobre datos para un reportaje sobre supuestos vínculos con el narco, en redes sociales se ha denunciado la publicación de números celulares, entre ellos el de José Ramón López Beltrán, hijo del presidente.
El mensaje compartido era de una cuenta con el número +52 669 127 45 61, de una cuenta de empresa, con el mensaje: “No soy un Bot, usted no me representa. #NarcoCandidataClaudia #NarcoDictadorAmlo
#NarcoGobiernoMorena #NarcoPresidenteAmlo. Quiere echarle la culpa a alguien, acusa a Palacio y quéjese con su patrón”.
Estos hashtags han sido usados en frases que han acompañado a los reportajes de The New York Times y Latinus y replicados por otros medios sobre una supuesta investigación del gobierno de Estados Unidos al presidente por recibir, mediante sus colaboradores y hasta sus hijos, dinero del narco para la campaña presidencial del 2006 y del 2018, lo que ha sido desmentido por el presidente y por el gobierno de Estados Unidos.
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