Tras 16 años LVMH abre Samaritaine: el mayor palacio sibarita, en París

Samaritaine, símbolo de máximo lujo

El punto es que para la reapertura de Samaritaine, el magnate Bernard Arnault no ha dejado nada librado al azar.

Principalmente, porque además de las más refinadas tiendas, el edificio departamental construido en 1870 por la familia Cognacq-Jay, contará con 96 apartamentos de vivienda pública y dos pisos de estacionamiento.

Samaritaine albergará un spa Christian Dior y el hotel Cheval Blanc, con tarifa en el orden de los 1,500 dólares la noche, por supuesto con vista al Sena.

Además LVMH cedió la gestión de la tienda al minorista libre de impuestos DFS, que el grupo adquirió en 1996, que vende en 16 aeropuertos y 18 grandes superficies multimarca, por lo tanto se entiende que el sitio recibirá una cantidad de público high end internacional.

De esta forma, la historia de Samaritaine parece haber cerrado un capítulo que incluyó manifestaciones por parte de cientos de empleados, preocupados porque el palacio sibarita de LVMH “cerrara sus puertas para siempre”.

El renovado complejo rendirá homenaje al diseño Art Nouveau original del edificio, sin riesgos de seguridad, tras el diseño del arquitecto Peter Marino.

Contará con baldosas de vidrio, pero con una capa de hormigón debajo, para evitar roturas y es considerada como una de las obras maestras del buen gusto de los últimos tiempos.

“La ciudad del futuro estará vinculada a la conservación inteligente del espacio y a comunidades que vivan en edificios flexibles y de uso múltiple. De eso trata un proyecto mixto como éste”, argumentó Jean Jacques Guinony, director financiero de LVMH y CEO de La Samaritaine, en una conferencia de prensa ofrecida para presentar el complejo casi terminado.

El frente de La Samaritaine lista para abrir sus puertas el 19 de este mes. Foto Simón García ArqFoto.com.forbes