Trump: «Retos y oportunidades para los demócratas»

Esfuerzos comedidos para legislación bipartidista. Una campaña agresiva para definir y demonizar a los nuevos líderes de comisiones en el Congreso. Más insultos y ataques políticos del presidente Donald Trump.

Con los demócratas tomando el control de la Cámara de Representantes, los republicanos por primera vez en la era de Trump no tienen dominio absoluto de todas las ramas del gobierno federal. Y esa realidad nueva en que se ve Washington ahora representa claros retos para la Casa Blanca, aunque también algunas oportunidades políticas. Los asistentes han estado preparándose tras bambalinas para ese resultado desde hace semanas y ahora redoblarán sus trabajos antes de que el Congreso reanude sesiones en enero.

El primer paso casi seguramente les corresponde a los demócratas. Con su recuperación de la cámara baja impulsada por la energía anti Trump de sus partidarios, los demócratas enfrentan ahora expectativas de sus constituyentes de castigar a Trump, usando sus nuevos poderes para lanzar una serie de investigaciones de asuntos como los negocios del presidente y potencial corrupción de miembros del gabinete, al tiempo que tratar de obtener las declaraciones fiscales de Trump.

Pudiera además existir mayor presión para un juicio político a Trump, aunque las probabilidades de impugnarlo son remotas dado que los republicanos controlan el Senado. Trump está listo para esa pelea.

“Si los demócratas van a desperdiciar el Dinero de los Contribuyentes para investigarnos en la cámara, entonces nosotros nos veremos forzados a ponderar investigarlos a ellos por todas las filtraciones de Información Secreta, y más cosas, al nivel del Senado”, dijo Trump en Twitter el miércoles. “Nosotros también podemos jugar así”.

A medida en que los sondeos mostraron que era muy probable que los demócratas recuperasen la Cámara de Representantes, comenzaron en la Casa Blanca los callados esfuerzos para prepararse para un capítulo más disputado de la presidencia de Trump. Aunque no se estableció ninguna sala formal para esos trabajos, altos asesores se reunieron para preparar la estrategia del gobierno para combatir a los envalentonados demócratas. El propio Trump participó ocasionalmente en conversaciones informales sobre el futuro, de acuerdo con dos altos funcionarios de la Casa Blanca que pidieron preservar el anonimato.

La estrategia central: Defenderse lanzándose al ataque y tornar la opinión pública contra las investigaciones demócratas caracterizándolas como extralimitaciones diseñadas para causar estancamientos en el Congreso.

Los republicanos de seguro harán de la presidenta de la cámara baja Nancy Pelosi el blanco de su ira y Trump no perdió tiempo para hacer notar que Pelosi en el puesto pudiera ser buena para los prospectos políticos republicanos. Trump dijo en tuit que si agitados demócratas “le dan problemas, quizás podemos añadir unos cuantos votos republicanos. ¡Ella se ha ganado ese gran honor’”.

Además de Pelosi, los republicanos lanzarán ataques contra los líderes de las comisiones que encabezarán las pesquisas. Entre los estarían el representante Jerrold Nadler al frente del panel de asuntos judiciales y Elijah Cummings en el de Supervisión y Reforma del Gobierno.