La artralgia suele tratarse con algunos antiinflamatorios, e incluso, con terapia física o masajes.
Luego de vacunarse contra el COVID-19 con las dosis de Pfizer o Moderna, desde 2021, algunas persona reportaron artralgia como efecto secundario, de acuerdo con reportes de la Agencia Española del Medicamento.
La artralgia es la incomodidad, dolor o inflamación que surge en el interior de una articulación, incluido el cartílago, el hueso, los ligamentos, los tendones o los músculos, detalla Mayo Clinic.
Las personas que presentan dolor en las articulaciones puede ser suave y causar simples molestias después de realizar ciertas actividades, o bien, puede ser intenso y limitar los movimientos del cuerpo.
¿Cuáles son las causas del dolor en las articulaciones?
La altragia o dolor en las articulaciones puede estar causado por distintos factores, como traumatismos, o por enfermedades infecciosas como el sarampión, la influenza o la hepatitis.
Las enfermedades degenerativas como la osteoartritis o la artrosis, trastornos del sistema inmunológico, obesidad y tendinitis también pueden ser causa de la enfermedad, detalla la Biblioteca Nacional de Medicina.
¿Cuáles son los síntomas de la artralgia?
Algunos de los signos que presentan las personas con artralgia son los siguientes:
- Inflamación en las articulaciones.
- Temperatura elevada en el área.
- Sensibilidad.
- Enrojecimiento en el área de dolor.
- Dolor al realizar determinado movimiento o actividad física.
¿Cómo se trata el dolor de las articulaciones?
En primer lugar, los médicos deberán encontrar la causa del dolor de las articulaciones para recetar el tratamiento adecuado, el cual, a menudo, suele controlarse con analgésicos, corticoesteroides o antibióticos, señala la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica, (ASCO por sus siglas en inglés).
Del mismo modo, los expertos en salud recomiendan algunos métodos de autocuidado para tratar el dolor articular como los siguientes:
- Fisioterapia.
- Acupuntura.
- Actividad física: De acuerdo con los expertos de la ASCO, el ejercicio puede ayudar a controlar el peso para que haya menos presión en las articulaciones y puede fortalecer los huesos y músculos que rodean las articulaciones, así como aumentar la flexibilidad articular.
- Compresas calientes o frías.
- Masajes terapeúticos.
El Financiero