El Wendigo es una leyenda de los nativos angloquinos y otras tribus que habitaron en los Grandes Lagos de Canadá y los Estados Unidos.
Los angloquinos, antiguos pobladores de Canadá y Estados Unidos que habitaban la Región de los Grandes Lagos, temían al Wendigo, una criatura ancestral que moraba en la profundidad de los bosques. Su tamaño descomunal, cadavérico aspecto y el sigilo con el que se desplaza en el follaje lo hacían un ser esquivo del cual era imposible huir. ¿Pero qué es el wendigo y qué significado tenía para los angloquinos?
Procedencia del término
Es probable que el término Wendigo (en inglés, windigo) proceda del término proto-algonquino wi·nteko·wa, que significa “búho”. Otras formas de referirse a este ser son wiindigoo, en idioma ojibwa; wìdjigò en lengua algonquina, y wīhtikōw en idioma cree.
Otro significado de la palabra Wendigo sería “espíritu maléfico que devora humanos”. Esta es la principal característica del Wendigo: el hambre insaciable que siente por la carne humana, de la cual nunca se cansa. Por más que coma, su apetito no hace más que crecer.
Cómo es un Wendigo
El aspecto físico de un Wendigo es el de una criatura raquítica (casi cadavérica) y de gran altura. Sus extremidades son largas, sus dedos muy finos y sus uñas en extremo afiladas. En su cabeza tiene un par de cuernos similares a los de un alce y sus ojos son resplandecientes. Muchas ocasiones su cráneo se representa como el de un animal.
Otras descripciones afirman que sus ojos son más bien de un aspecto lechoso, lo que los hace parecer ciegos. Gracias a sus grandes colmillos, el Wendigo logra rasgar la carne humana con suma facilidad.
Esta criatura está cubierta de un pelo enmarañado que se combina con algunos pedazos de piel putrefacta. El Wendigo aumenta su tamaño conforme devora carne, por lo tanto, puede alcanzar alturas inconcebibles.
Un pavoroso cazador
Las leyendas afirman que el Wendigo es capaz de trepar con habilidad por los árboles, lo que le ayuda para seguir a los viajeros en completo sigilo y sin dejar rastros. Una vez que se encuentra por encima de su víctima, la toma con sus enormes manos y la levanta por los aires para devorarlo.
Otra forma de atraer a sus víctimas a lo profundo del bosque es imitando voces humanas. Es así que pude confundir a los cazadores o exploradores que se aventuran a lo profundo de la vegetación para jamás volver a aparecer.
Ello también servía para explicar entre el pueblo algonquino las desapariciones entre su gente a causa del “espíritu de los lugares solitarios”, como también se le llamaba al Wendigo.
Canibalismo: la causa de la leyenda del Wendigo
Entre las tribus del norte de los Estados Unidos, el canibalismo era visto como una práctica pavorosa y totalmente prohibida. La leyenda de este ser nació a causa de ello: toda persona que osara alimentarse de un semejante corría el riesgo de ser poseído por un Wendigo. Por lo tanto, el relato pretendía ser una advertencia o lección para todo aquel que incurriera en esta práctica.
Es probable que los largos y crudos inviernos de la Región de los Lagos hayan provocado casos de canibalismo entre los nativos. La necesidad de explicar estos actos o impedir que se repitieran llevó a estas tribus a crear un mito que hoy conocemos como Wendigo.
Era mejor visto que, en lugar del canibalismo, los nativos cometieran suicidio o se dejaran morir de hambre. Todo con tal de que el Wendigo no hiciera presa de ellos.
El trágico caso de Swift Runner
Uno de los casos más trágicos relacionados al Wendigo y su “capacidad” de influir en la mente humana, ocurrió en el invierno de 1879 cuando Swift Runner, un nativo americano, asesinó y se comió a toda su familia. Según Animal Planet, Swift Runner afirmó estar poseído por un “espíritu de viento” que lo llevó a cometer los asesinatos. Aun así, Runner fue ahorcado por su crimen.
A lo largo de los años no faltaron otros relatos similares entre habitantes de diferentes comunidades que se extendían desde el norte de Quebec hasta las Montañas Rocosas. El aislamiento por la nieve y el hambre son capaces de hacer que un hombre pierda el sentido de la realidad y el autocontrol para cometer esta clase de crímenes.
El Wendigo en la literatura
Esta criatura del folklor de los antiguos habitantes de Norteamérica ha sido motivo de inspiración en la literatura de horror. Quizás la historia más celebre al respecto sea el relato de Algernon Blackwood “El Wendigo”.
Stephen King también retoma a este ser en su novela Cementerio de mascotas, en la que un padre de familia se interna en los bosques dominados por el ancestral Wendigo.
El autor inglés Adam Nevill en su obra El ritual nos habla de una criatura mitológica muy semejante al Wendigo, aunque la sitúa en los bosques del Círculo Ártico Escandinavo.
EnNoche de Navidad o El Wendigo (2017), el autor español Javier Torras de Ugarte también se refiere a esta pavorosa criatura en un relato inspirado en la obra ya mencionada de Algernon Blackwood.
Otro sentido al término Wendigo
Según el libro Rewriting Apocalypse in Canadian Fiction, las historias de wendigos se consideraron en su momento como una “ilustración” de la naturaleza violenta y primitiva de los propios pueblos que las contaban, según la visión de los colonos europeos que llegaron a América del Norte.
Pero, irónicamente, estas historias podrían representar en realidad la respuesta de los pueblos indígenas a la horrible violencia que sufrieron por los colonizadores. De hecho, muchos antropólogos creen que el concepto de wendigo se desarrolló después de que los nativos tuvieran contacto con los europeos.
Éstos llevaron a cabo masacres y demás actos violentos para despojar de sus tierras a los nativos originales. De esa manera lograron expandirse a sus anchas y conquistar gran parte de las zonas que hoy conocemos como Canadá y los Estados Unidos.
Muy Interesante México