Una de las grandes apuestas para impulsar el crecimiento económico de México en los próximos años era, sin lugar a duda, la industria del turismo; pero con la llegada de la pandemia de coronavirus el sector se enfrenta no sólo al riesgo de eventuales confinamientos decretados por las autoridades, sino al reto de mantener la confianza y la seguridad de los visitantes, para evitar más contagios.
De acuerdo con Eduardo Paniagua, presidente de la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes (AMAV), antes de que llegara el covid-19 el turismo en el país se encontraba en una fase de innovación, donde la principal encomienda era ubicar nuevas atracciones turística, para ya no seguir vendiendo lo mismo.
Asimismo, se buscaba que el impacto positivo que estaba dejando el turismo en el país permeara en toda la cadena de valor, y pudiera llegar a la base de la pirámide, que muchas veces era la que menos se beneficiaba.
Sin embargo, con la llegada del covid-19, que a la fecha ha cobrado la vida de más de 100,000 personas y ha infectado a más de un millón, los proyectos tuvieron que ser reenfocados para salvar a una industria que sufrió los embates más fuertes de la pandemia.
«Lo primero que debimos hacer fue darles atención a los turistas varados y ayudarlos a regresar a sus hogares. Esa fue una primera etapa, porque teníamos a muchos visitantes en los destinos turísticos cuando se decreta el confinamiento. Lo segundo fue tranquilizar a todas aquellas personas que ya habían pagado por un lugar y que ahora veían que no podrían realizar su viaje. Ante ello nos dimos a la tarea de reagendar lugares, obtener reembolsos o notas de crédito», platica Paniagua.
Tras cumplirse los 100 días de confinamiento y ante las pocas esperanzas de que la actividad se retomara en el corto plazo, la industria entendió que era momento de capacitarse para cambiar la forma en cómo se hacía turismo en México.
«Puedo decir que el turismo en el país avanzó siete años en temas tecnológicos en apenas unos meses, no sólo para mantener un contacto constante con autoridades estatales y municipales, sino también para seguir promocionando destinos aún a la distancia y, a la vez, brindarle a la gente un escape, aunque fuera digital», señala el representante de la AMAV.
Una de las actividades más exitosas que realizaron durante la pandemia fueron los tours teóricos, que tenían como propósito que la gente conociera nuevas opciones de actividades turísticas de manera virtual, para que después pudieran vivir la experiencia ya de manera presencial.
Entre los tours teóricos más exitosos están Pajareando en Quintana Roo, El Cristo Negro de Campeche, La cata de vino y chocolate en San Luis Potosí, La ruta del café en Chiapas y La ruta del cacao en Tabasco.
Aunque las restricciones se han flexibilizado y algunos destinos ya han podido abrir sus puertas al turismo nuevamente, Paniagua afirma que el sector aún está muy lejos de regresar a los niveles precovid.
«Para que la industria se recupere, tenemos que salir. El covid-19 llegó para quedarse y lo único que nos queda es aprender a hacer turismo de manera responsable, siguiendo los protocolos de salud, como es son el cubrebocas, lavarse las manos, la sana distancia, pero no podemos seguir encerrados», recalca.
El representante sectorial asevera que la industria se ha estado preparando para recibir al turista de manera segura, diseñando y aplicando protocolos como el desarrollado por la AMAV -«Manejo responsables del turista»- con el que se han capacitado a miles de guías de turistas, agentes de viajes, touroperadores, e incluso a vendedores ambulantes de comida y taxistas.
«No podemos esperar a que el gobierno lo resuelva. Si vamos a salir, hay que hacerlo de manera responsable», concluye.
Para conocer qué estrategias está implementando el sector turismo en México y las expectativas que se tienen para el próximo año, lo invitamos a nuestro webinar Reactivación Económica del Turismo en México. Registro aquí.
