Jóvenes desaparecidos en Lagos de Moreno: Fiscalía halla restos óseos y cuatro cráneos calcinados

Peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) coadyuva en la fijación y recolección de los indicios, en tanto que los segmentos fueron trasladados al Servicio Médico Forense.

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Fiscalía de Jalisco confirmó que tras el operativo realizado ayer en una finca de Lagos de Moreno próxima a donde desaparecieron cinco jóvenes, se localizaron «restos óseos y cuatro cráneos con huellas de calcinación», pero el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) trabaja en los dictámenes para confirmar la identidad. 

El inmueble está en la comunidad La Troje, a 40 kilómetros de distancia en línea recta de la cabecera municipal de Lagos de Moreno.

«A través de un reporte realizado el día de ayer donde se mencionaba de la posible localización de restos humanos en el interior de una finca, elementos de la policía municipal acudieron a dicho lugar, donde encontraron lo que parecieran ser restos óseos y cuatro cráneos con huellas de calcinación en su totalidad, sin poder determinar rasgos físicos, edad o sexo», informó la dependencia en un comunicado. 

Peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) coadyuva en la fijación y recolección de los indicios, en tanto que los segmentos fueron trasladados al Servicio Médico Forense.

«La información que se proporciona en el presente comunicado es de carácter preliminar por lo que puede sufrir modificaciones conforme se den los avances en torno a las investigaciones, lo que se estará actualizando a través de los canales oficiales de esta dependencia estatal», puntualizó. 

Ayer, la Fiscalía de Jalisco informó que encontraron manchas de sangre y calzado en una finca en obra negra, donde habrían estado los cinco jóvenes de Lagos de Moreno que desaparecieron el 11 de agosto.

De acuerdo con la dependencia, continuarán los operativos de búsqueda de Roberto Carlos Olmeda Cuéllar, Diego Alberto Lara Santoyo, Uriel Galván González, Jaime Adolfo Martínez Miranda y Dante Cedillo Hernández, cuyas edades oscilan entre los 19 y 22 años.

Proceso