Kleroterion: Vamos por una buena ruta

Existe un gran movimiento nacional, denominado Ruta 5, encabezado por Manuel Espino Barrientos, compuesto por líderes, ciudadanos y organizaciones sociales y que hoy en día, tiene presencia en todos los estados con más de 1500 organizaciones y/o agrupaciones con la finalidad de unificar, ser plural y sobre todo incluyente en diversos temas de vital importancia para nuestro país, así como tener funciones comunitarias.

Dicho movimiento fue creado en noviembre de 2015, derivado del interés por participar más allá de los partidos políticos, así como la inminente crisis política  económica, social y también moral, que acontece en estos sectores a México.

En su Asamblea fundacional aprobó luchas por las siguientes causas: generar una nueva cultura política que reconozca la primacía de la persona y su eminente dignidad sustentada en valores que le den dimensión ética, democrática, solidaria y humanista; instaura un nuevo y mejor sistema político que reforme el ejercicio del poder, rediseñando y ordenando al Estado y sus instituciones hacia la sociedad, desde una efectiva participación ciudadana.

Además, deberá significarse por reconocer la primacía de la persona y defender los derechos fundamentales de todos los mexicanos y sus familias; trasciende las visiones irracionales y reduccionistas, ideológicas y partidistas, autoritarias y populistas que, además de provocar repulsión de los ciudadanos, impiden la unidad y el desarrollo nacional; desarrollar una agenda programática, eminentemente social, que permita abanderar causas comunitarias y sumar paulatinamente la voluntad libre de los mexicanos en una alianza ciudadana plural e incluyente e involucra activamente en los temas de interés social, participando en esfuerzos ya establecidos o convocando a realizarlos.

Se distingue de ser ordenada, pacífica y democrática, respetuosa del Estado de Derecho; fomenta la reconciliación nacional a favor de la paz y facilita el entendimiento racional entre quienes piensan diferente, desde el diálogo, la tolerancia y la generosidad del perdón.

Por otro lado, se distingue por una oposición crítica al sistema político, pero propositiva y  coadyuvante con las acciones de gobierno que sean en beneficio del país y de los ciudadanos, sin consentir la corrupción o solapar sus errores y deficiencias; se organiza y estructura en forma horizontal y democrática, con criterio de eficacia, mediante acuerdos surgidos del diálogo y la deliberación.

Este año Ruta 5 convocó a todos los candidatos a la presidencia de la República a su consejo nacional para escuchar sus propuestas, y en una Asamblea histórica realizada el mes de abril del presente, en la CDMX,  con más de 1200 delegados representando a todas las organizaciones adheridas, decidió democráticamente apoyar al Licenciado Andrés Manuel López Obrador.

Ahora bien, en pasados días, se inauguró una sede de esta estrategia ciudadana en mi estado, Nuevo León, donde fui designado como Coordinador de la Zona Norte del País.

Se explicó que para Ruta 5, lo más importante es la dignificación de las personas, teniendo como vínculo principal, coadyuvar con las tareas a los servidores públicos, reconociendo también, el buen trabajo de muchos, por lo que el movimiento tiene como objetivo hacer ciudadanía y dignificar la tarea política, con la motivación principal de ayudar al país y a superar las malas experiencias por los malos gobiernos en todas la esferas, así como los legisladores.

Posteriormente, sostuvimos un encuentro en Tampico, Tamaulipas, Manuel Espino y su servidor, con miembros del movimiento, para continuar con la tarea de formar ciudadanía y ayudarle a México a tener gobernantes más eficaces, con una fuerza que nace directa y exclusivamente de los ciudadanos, buscando siempre una mejor relación con el político, gobernante y funcionario, así como con el ciudadano, buscando en todo momento la participación ciudadana en la vida pública, involucrándose en los problemas de la sociedad, promulgando el verdadero valor que tiene ser elector.

Por lo anterior, reitero que la solución de las problemáticas de México, no sólo recaen en un político, gobernante o legislador, sino también en los ciudadanos, en esa colectividad necesaria y fundamental para que nuestro país avance, estoy convencido que con buenos representantes y con buenos ciudadanos, podemos llegar muy lejos y esa es la visión de este movimiento, con una bandera de pluralidad e inclusión, teniendo una sola meta, la prosperidad de nuestro país, la tranquilidad de nuestras comunidades, una relación político ciudadana eficaz y respetuosa, con dignidad humana para todos y que la política retome su cauce verdadero, su aspecto primordial, que es el bienestar de la sociedad.

Creo rotundamente en la posibilidad de acabar con el divorcio de la sociedad civil con el Gobierno, por lo que desde este movimiento, lo que se busca es la participación activa de la sociedad en torno a un objetivo que es el bien común.

Cabe mencionar que en Ruta 5 no se reciben fondos públicos, no es un partido o alianza política, e incluso no existe obligación para los integrantes, hay total libertad de pertenecer a esta agrupación, y libertad en todo sentido, de participación, de opinión, de análisis e interpretación, lo que se busca exclusivamente es generar cuadros de apoyo ciudadano y poder enfocarlos a la vida pública.

Concluyo diciendo que esta iniciativa, con sedes en todos los estados de la República, no se encuentran sesgos ideológicos, la única condición es que todos quieran ver a un México que le vaya bien, que nuestras familias, comunidades y ciudadanos les vaya bien y puedo decir que “vamos por muy buena ruta, por Ruta 5”.