Samuel debe conocer la sequía mental del gobernador potosino

Dice el gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo, alias el Pollo, que por ningún motivo nos dará agua a los nuevoleoneses. “Sería un relajo, una locura. El agua es de los potosinos; la vamos a defender por encima de cualquier tratado o convenio”.

Una opción que tenemos (el plan de traer agua de la presa Vicente Guerrero no es viable porque está tan seca como la presa El Cuchillo, aunque sea cuatro veces más grande), es traer agua del Río Tampaón, afluente del Pánuco. 

El Pánuco esta muy contaminado, pero su afluente no. 

Y regreso al tema principal de mi artículo: no es cierto lo que dice Gallardo. Su declaración es una mentira. El agua es de los mexicanos. Y en Nuevo León vivimos mexicanos. 

Si el gobernador de San Luis Potosí quiere adueñarse de los recursos naturales potosinos, que se vaya a fundar su propio país; un país a modo suyo, porque como gobernador no tiene jurisdicción del agua. 

Es jurisdicción federal. 

Crisis del agua las hay en todo el mundo. Ahora la sufrimos en Nuevo León. La situación es cíclica. 

Se le olvida al gobernador de San Luis Potosí que 30% de los mexicanos no cuentan con el mínimo indispensable de agua y 11% no tiene ningún acceso a agua potable. 

Por eso México está entre los 17 países del mundo en crisis hídrica. 

En San Luis Potosí, por lo pronto (y esperemos que así sigan), el agua abunda… igual que el número de pobres. 

Son tantos los potosinos en extrema pobreza que tienen que migrar a Nuevo León. 

Dado que vivimos todos en un mismo país, a los potosinos no les pedimos visa para entrar a nuestro estado; pero Ricardo Gallardo, alias el Pollo, sí quiere negarle la visa al agua para que entre a tierras regiomontanas. 

Si la opción viable a largo plazo es traer agua del Río Tampoán a través de un acueducto hasta Monterrey, tendrá que aguantarse Ricardo Gallardo, alias el Pollo. 

La última palabra la tiene la Federación, no él. 

Y aquí sólo nos restan, además de los pozos urbanos, 40 días de agua de la Presa Cerro Prieto y 17 de La Boca. 

Lo que sí podría decidir el municipio regiomontano (y si quiere el Pollo hablamos con Luis Donaldo para convencerlo), es poner más bebederos en la Alameda, y hasta una fuente en honor al gran poeta de San Luis Potosí, Manuel José Othón, quien compuso el más grande poema a la sequía, al “salvaje desierto” y a la “asoladora atmósfera candente”. 

Que lo lea el Pollo en vez de piar barbaridades.