Snailbrook: la utópica ciudad que Elon Musk quiere construir en el desierto texano

El proyecto de Snailbrook también incluye más de 100 viviendas, así como amenidades como una piscina y un área deportiva al aire libre.

Elon Musk, el polémico y criticado dueño de empresas como TeslaTwitter y SpaceX, es un tipo que sueña a lo grande. Ahora, su plan es erigir una ciudad en pleno desierto para que en ella vivan sus miles de empleados. Esta ciudad llevaría por nombre Snailbrook y te contamos más detalles acerca de ella.

Snailbrook se situaría en el desierto del estado de Texas. En específico, a las afueras de Austin, donde Musk ya comenzó a adquirir miles de acres de tierra para erigir la ciudad en la que sus empleados vivan y trabajen, según informó Wall Street Journal.

El nombre de la ciudad sería una aparente referencia a la mascota de la empresa de construcción de túneles de Musk, la Boring Company, según el mismo medio.

Musk quiere que los empleados de sus empresas Boring Co, Tesla y SpaceX, todas las cuales tienen importantes instalaciones de producción cerca de Austin, “puedan vivir en casas nuevas con alquileres por debajo del mercado”.

Los mismos informes especifican que los trabajadores tendrían 30 días para desalojar las instalaciones si fueran despedidos o renunciaran.

Una ciudad peculiar

El proyecto de Snailbrook también incluye planes para construir más de 100 viviendas, así como amenidades como una piscina y un área deportiva al aire libre. Asimismo contempla construir en el municipio una escuela Montessori para los hijos de los empleados de Musk. Fotos subidas a Facebook por los lugareños muestran carteles colgados que dicen: “Bienvenido. Snailbrook, TX, est. 2021”.

El condado de Bastrop no ha recibido ninguna solicitud para incorporar la ciudad. Según las leyes de Texas, para ello sería necesario que la zona tuviera al menos 201 residentes y la aprobación de un juez.

¿Podrá en verdad Musk erigir esta ciudad? Las leyes de Texas son notablemente más relajadas que las de otras jurisdicciones de Estados Unidos, con menos leyes medioambientales y laborales y sin impuesto de sociedades ni de plusvalías para las personas físicas. Esto permitiría a Musk establecer algunas de sus propias normativas en su ciudad.

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