Aquí te explico la votación en la Corte sobre la Ley de Electricidad

Era previsible que ayer la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) validara la constitucionalidad de la Ley de la Industria Eléctrica que en marzo de 2021 cambió el Presidente Andrés Manuel López Obrador para limitar la participación privada en la generación eléctrica. 

¿Qué votaron los ministros de la SCJN? 

Los senadores de oposición habían interpuesto ante la SCJN una acción de inconstitucionalidad contra la Ley AMLO, porque viola el principio de libre competencia. Y si bien, la mayoría de los ministros votaron en contra (siete de once) no alcanzaron los ocho votos para la mayoría cualificada que invalidaba esta Ley. O sea, la Ley AMLO se queda cómo está. 

¿Cuáles son los antecedentes de esta votación en la Corte? 

El Presidente y su fracción legislativa Morena, modificaron la Ley de la Industria Eléctrica (LIE) a fin de reducir la participación de la iniciativa privada en la industria eléctrica, como lo contemplaba la Reforma constitucional de 2013, promovida por Peña Nieto. También da facultades a la CFE de negar el acceso a la red de transmisión si no considera “técnicamente factible” las propuestas privada. O sea, la CFE se queda como juez y parte. 

La Ley de la Industria Eléctrica fue la respuesta de AMLO al intento de las empresas privadas de frenar previamente un acuerdo presidencial de carácter administrativo. Las empresas privadas alegaban que este acuerdo contradecía la Constitución. Entonces lo que hizo AMLO fue cambiar la Ley, además de presentar una iniciativa de Reforma Constitucional que está pendiente de votarse en el Congreso. 

¿Por qué era previsible que la SCJN votara a favor de la Ley AMLO? 

Porque ya el Presidente se había pronunciado muy duro en contra de la Suprema Corte y ésta le contestó dándole varios descontones recientes: le echó abajo su iniciativa de que exfuncionarios públicos no pudieran trabajar en la iniciativa privada 10 años después de dejar el cargo y le impidieron al Presidente que pueda hacer uso de los recursos ahorrados con la “austeridad”. Sin embargo, es innegable que Zaldívar y López Obrador se llevan bien… incluso ,más de lo conveniente en la división de poderes. Así que Zaldívar tenía que respaldar al inquilino de Palacio Nacional empatando el marcador. 

¿Fue un triunfo para AMLO?

Fue una victoria a medias para el Presidente. Por supuesto, deja a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), en una posición ventajosa frente a las centrales eléctricas privadas y frente al negocio de las energías renovables y limpias. 

En un artículo pasado comenté los amparos y demandas que han presentado las centrales privadas contra esta Ley. Aclaro que estos litigios van para largo y para cuando se resuelvan, el tabasqueño ya no estará en la Presidencia y se habrá salido con la suya. 

¿Quién pierde? 

Las empresas privadas generadoras de energía porque les será más difícil defenderse ante los tribunales. Y pierde también el tránsito que tenemos que hacer en México tarde o temprano a las energías limpias y renovables. De igual manera pierde su palabra en los tratados internacionales y pierde la división de poderes en México, que ha quedado en entredicho.