Diputados clausuran el Parlamento Abierto sobre la reforma eléctrica para iniciar la discusión en comisiones

Durante la clausura del Parlamento Abierto sobre la reforma eléctrica, la secretaria de Energía, Rocío Nahle, resaltó que la independencia de un país se mide en litros y watts con lo que los combustibles están directamente ligados a la seguridad sanitaria, económica y nacional.

La iniciativa de reforma a tres artículos de la Constitución para fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) comenzará a discutirse en marzo en las comisiones unidas de Energía y Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, luego de que este lunes terminó en San Lázaro el Parlamento Abierto sobre la reforma eléctrica.

En la clausura de los foros, donde se discutieron diversos temas en materia energética, participó la secretaria de Energía, Rocío Nahle, quien en defensa de la iniciativa impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, resaltó que la independencia de un país se mide en litros y watts con lo que los combustibles están directamente ligados a la seguridad sanitaria, económica y nacional. 

La titular de la Secretaría de Energía (Sener) recordó que en enero de 2019 el 55% de la energía era despachada de la CFE, pero en los últimos tres años infraestructura por 6,300 megawatts de energía intermitente entró en operación, producto de las subastas de largo plazo, además de 7,500 megawatts de nueva infraestructura de privados de permisos anteriores otorgados por la Comisión Reguladora de Enegía (CRE).  

Por ello, hasta el día de hoy, se han pagado más de 6,000 millones de pesos a los productores privados de energía renovable para la adquisición de sus certificados de energía limpia (CEL, instrumento bursátil para incentivar la generación renovable diseñado en la reforma del 2013), por lo que la CFE que es el suministrador básico del país y quien consume estos CEL ya ha financiado por lo menos la mitad de la capacidad instalada por estas subastas, por la obligación que tiene de comprar mediante este mecanismo, además de toda su transmisión y distribución de la energía.   

“Todo esto lo carga la CFE y los consumidores y no sólo ha sido el costo sino que en el orden de despacho se obligó por ejemplo a despachar las hidroeléctricas hasta el sexto lugar fuera de toda lógica y beneficio económico”, aseguró.  

Nahle reveló además que al tratar de cambiar estas distorsiones mediante modificaciones a la Ley de la Industria Eléctrica y acuerdos, el Gobierno ha recibido más más de 1,700 amparos, lo que orilló al cambio constitucional ya que el sistema está en riesgo físico puesto que se emiten cientos de alarmas diarias en el sistema de distribución, por la conexión y despacho de más electricidad intermitente de la que permite el sistema.  

Nahle recordó que el sistema eléctrico demanda un máximo de 50,000 megawatts pero la CRE ha dado permisos desde el 2013 por 132,000 megawatts y hay infraestructura construida por 82,000 megawatts. Al volver autónomos a los reguladores del sector se les desvinculó de la política energética y se plantea devolverlos al gobierno central para que participen en la planeación.  

“Espero que haya el consenso entre todos y que se apruebe lo más rápido posible para poder seguir avanzando”, dijo.  

Posturas partidistas

Para clausurar los 42 días del Parlamento Abierto que se llevaron a cabo en la Cámara de Diputados, el PRD aseguró que buscará que la nueva iniciativa contenga las modificaciones y adiciones necesarias dijo Luis Ángel Espinosa Chásaro, coordinador parlamentario de este partido. También pugnará para que la CFE no sea la empresa monopólica que pretende la iniciativa aunque buscará un espacio para que se corrijan mecanismos que la dañan.  

A nombre de Movimiento Ciudadano, el diputado Manuel Herrera expuso que fortalecer a la CFE sin mecanismos de rendición de cuentas no garantiza la transición hacia energías limpias y aseguró que se discutirá a un nivel técnico lo que no fue posible durante los 25 foros del Parlamento Abierto, donde a favor de la propuesta participaron únicamente funcionarios y no expertos en el tema.  

Gerardo Fernández Noroña, a nombre del PT respaldó la propuesta asegurando que no se buscará un monopolio en materia de generación eléctrica para la CFE, sino que se dejará el 46% a los privados, aunque su partido no estaría en contra de que incluso el Estado llegara al 100%.  

Soy optimista en que alcanzaremos la mayoría calificada en diputados”, dijo, “yo creo que en marzo sacaremos esta propuesta ya le hemos dado mucho tiempo para su maduración”.   

Por parte del Partido Verde, el coordinador parlamentario Carlos Alberto Puente Salas dijo únicamente que los foros tuvieron la función de dar voz a todos los que quisieron participar y será en la discusión entre legisladores donde se afinará la iniciativa rumbo a la propuesta final.  

Santiago Torreblanca Engell, de PAN, reiteró que la reforma que busca la actual administración es dar un paso atrás en la competitividad y reducción de costos de la electricidad.  

“¿Qué importa que nos digan que nuestra electricidad está subsidiada, de dónde sale este subsidio? Este año será de otros 70,000 millones de pesos, las medicinas y el mantenimiento del sistema de salud cuesta eso, imaginemos un mundo sin dogmas donde se deje de subsidiar y de todas formas no cueste, nos alejamos de ese modelo con estos cambios”, aseveró.  

También argumentó que la CFE no es el Estado, que se debe fortalecer, pero con contrapesos, sin quitar la autonomía a la Comisión Reguladora de Energía.  

Moisés Ignacio Mier Velazco, coordinador parlamentario de Morena, recordó que 170 personas participaron en los 25 foros del Parlamento Abierto para discutir la reforma y que con propuestas concretas se discutirán los cambios constitucionales ya a nivel legislativo.  

En tanto, el PRI no fijó aún su postura, la cual será fundamental para la mayoría calificada necesaria para aprobar las modificaciones en materia energética.  

Finalmente, Rubén Ignacio Moreira Valdez, presidente de la Jucopo dijo a nombre del PRI que el cambio climático le importa a los priistas y quieren llevarlo a la Constitución, no solamente en materia eléctrica sino en todos los ámbitos como lo relativo al agua y a los bosques mexicanos, sin fijar una postura sobre la reforma eléctrica.  

“Desde hoy mi partido inicia una reflexión, no hemos definido una postura, sino escuchar lo que aquí se presentaba” aseveró.

El Economista